San Antonio Unido concentra sus energías en Cristóbal Campos. Por un lado, el club de la gaviota permanece atento a cada detalle de la evolución del guardameta, quien protagonizó un grave accidente de tránsito mientras conducía por la Ruta 78. Por otro, la entidad porteña empieza a diseñar el plan para que el apoyo al futbolista se extienda mucho más allá de la recuperación de las lesiones que sufrió en el impacto.

Guillermo Lee, el presidente del equipo lila, ha estado permanentemente preocupado de la evolución del golero formado en Universidad de Chile. De hecho, apenas se enteró del accidente, el dirigente llegó hasta la ex Posta Central para acompañarlo e interiorizarse de los complejos procedimientos médicos a los que sigue siendo sometido con la finalidad de recuperar la pierna derecha, la más dañada en el accidente. El timonel ha asumido, también, la vocería institucional respecto del estado de salud del portero. Fue quien confirmó a El Deportivo una amarga información: el golero tuvo que ser amputado definitivamente en parte de la extremidad, lo que marca el fin de su carrera deportiva. En ese duro instante, fue categórico. “Lo apoyaremos en todo”, manifestó. A esa muestra de respaldo se sumaron Universidad de Chile y el Sifup, a través de comunicados. En los partidos de todos los equipos nacionales ha habido manifestaciones de apoyo al guardameta. Su familia agradeció los gestos públicos y anónimos.

No hay seguros

San Antonio Unido ha asumido la responsabilidad en la recuperación del futbolista. En esa tarea, ha recibido apoyo del Sifup, Universidad de Chile, Colo Colo y la ANFP, entre los que se han conocido públicamente. En lo administrativo, sin embargo, existen vacíos. “En la Segunda División no hay seguros de accidentes, lamentablemente. Cristóbal tiene contrato hasta finales de temporada con el club. Nosotros le vamos a ofrecer una extensión por todo el tiempo que dure su recuperación. Nos vamos a hacer cargo del proceso. Estamos estableciendo alianzas con distintos clubes y clínicas. Buscaremos darle la mejor rehabilitación posible”, explica Lee.

Paralelamente a la evolución de las traumáticas dolencias del jugador, en el SAU miran hacia el futuro de Campos, ahora en una nueva condición. Inicialmente, la relación con el arquero se extendía hasta diciembre, pero la licencia médica que recibirá la prorroga automáticamente hasta el restablecimiento de sus capacidades. Como esa situación es compleja, al menos desde el punto de vista de un deportista de alto rendimiento, en la institución prescinden de ese elemento y adelantan que el respaldo será irrestricto y concreto. “El contrato de trabajo se alarga ipso facto desde el momento en que el jugador presenta una licencia médica, que impide cualquier otro tipo de gestión. Mientras esté con licencia, va a ser jugador de San Antonio Unido. Y cuando él esté consciente, le vamos a ofrecer una extensión, insisto, sin importar el tiempo. Lo hemos dicho: Cristóbal se va a ir de San Antonio cuando él quiera irse. No por otra cosa. Será jugador nuestro ad eternum”, compromete Lee ante El Deportivo.

El dirigente es categórico. “Cristóbal tendrá contrato hasta que él quiera. Nosotros no tenemos problemas en mantener un contrato y que después siga ligado a nuestra institución si, eventualmente, en el peor de los casos, no pueda jugar al fútbol. Nosotros le vamos a ofrecer un contrato para que siga ligado como preparador de arqueros, como entrenador, eventualmente y que haga la carrera con nosotros”, adelanta el directivo.

Naturalmente, por estas horas, Campos no ha sido comunicado de la intención, pues la prioridad es que se recupere. “Todavía no hemos conversado con él, por razones bastante obvías. En este momento solo tenemos que preocuparnos de recuperarlo. Está el compromiso mío con la familia de que el jugador no va a quedar solo jamás. Nunca va a quedar desprotegido por San Antonio Unido”, establece.

Ya hay una experiencia

Lee resalta que la conducta del club forma parte de los principios institucionales y recuerda que ya se adoptó una medida similar en el caso de Kevin Leiva, quien, inicialmente, no estaba en condiciones de seguir practicando fútbol profesional. “Lo hicimos de la misma forma con Kevin, que en criterio de nuestros médicos no debió seguir jugando fútbol. También le ofrecimos un contrato eterno en el club”, explica.

Cristóbal Campos, en un entrenamiento de la Selección. (Foto: Photosport).

La propuesta incluía, tal como la que se le planteará a Campos en su momento, la posibilidad de que se fuera perfeccionando, pero, ante su recuperación, el jugador optó por un camino distinto: intentar el retorno a las canchas. “Nos presentó su renuncia voluntaria, una carta en la que renunciaba al club, porque quería tratar de seguir jugando al fútbol”, recuerda.

Después del paso por San Antonio Unido, Leiva militó en el Real San Joaquín. Actualmente, figura en los registros de Vicente Pérez Rosales, una escuadra de Puerto Montt que, en el último tiempo, adquirió notoriedad por haber reclutado al retirado Diego Rivarola para que lo defendiera en un encuentro por la Copa Chile ante Universidad de Concepción.

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