Más de seis meses. Exactos 187 días. Ese es el tiempo que ha transcurrido desde la última vez que alguien le robó puntos a Universidad Católica en San Carlos.
Fue San Luis de Quillota, el 4 de noviembre del año pasado, cuando venció 0-2 al equipo que aún dirigía Mario Salas. Aued, Buonanotte y Lobos, entre otros, dijeron presente esa vez.
De ahí para adelante, los cruzados sólo saben de triunfos en su casa, un recinto que a estas alturas ya mete miedo. Palestino en dos oportunidades, Deportes Temuco, Unión La Calera, Unión Española y Audax Italiano salieron derrotados. Encima, ninguno anotó más de un gol.
La Católica, en San Carlos, se siente bien. Y más aún este último tiempo, donde fecha a fecha el estadio agota prácticamente todas sus localidades. Para el clásico no será la excepción. Hasta ayer quedaban poco menos de 300 tickets en las ubicaciones más caras.
Ahora viene Universidad de Chile, otro equipo que cuando se trata de visitar la precordillera no sabe de puntuar hace largo tiempo. De hecho, cayó en sus últimas tres partidos en Las Condes: 3-1 en el Clausura 2017, 2-0 en la ida de la Copa Chile 2016 y 2-1 en el Clausura 2016.
El último triunfo azul en el estadio de la Católica se remonta al 5 de abril de 2015, cuando ganó por 2-4, con tres goles de Gustavo Canales y otro de Sebastián Ubilla. Michael Ríos, en dos oportunidades, marcó los tantos del dueño de casa.
"De local hicimos bien las cosas. En el momento en que nos tocó sufrir defendimos bien y en ataque hemos sido contundentes", dijo al respecto el arquero cruzado Matías Dituro.
En tanto, Germán Lanaro analizó así el clásico venidero: "La U tiene laterales que pasan mucho al ataque, es algo que podemos aprovechar. La U propone y nuestra forma de replegarnos y salir de contra puede verse favorecida".