Este 20 de octubre de 2023 quedará marcado como uno de los días más importantes en la historia del deporte chileno. Pese a que la competencia comenzó el miércoles, con el béisbol, la esperada ceremonia inaugural de Santiago 2023 en el Estadio Nacional estaba pactada para este viernes. Y uno de los momentos más esperados de la noche era el encendido del pebetero con la llama Panamericana y el misterio que se generó en la previa sobre quién sería el responsable de este simbólico acto.
La fiesta comenzó a las 20.30 horas, con la presencia de altas autoridades como el Presidente de la República Gabriel Boric, el presidente del Compite Olímpico Internacional (COI) Thomas Bachy y el presidente de Panam Sports Neven Ilic, entre otras figuras.
En el ámbito cultural, los espectadores disfrutaron de Los Jaivas y de los bailes típicos de cada una de las zonas del país, para dar paso a la presentación de las distintas delegaciones, instancia en la que Chile salió en el último lugar por el hecho de ser los anfitriones.
Massú, González y López, los elegidos
Hasta que llegó el momento. Ya sobre el final de la ceremonia, faltaba uno de los pasos más icónicos de los Juegos Panamericanos: el mencionado encendido del pebetero. Primero fue Kristel Köbrich que ingresó al recinto con la antorcha, quien se la entregó a Iván Zamorano y este a Alfonso de Iruarrizaga.
Posteriormente, la antorcha fue llevada a Nicolás Massú y Fernando González, que se subieron al escenario con forma de la geografía de Chile, luego se acercaron a la mítica medallista panamericana Lucy López y, finalmente, entre los tres, encendieron el pebetero con la llama Panamericana en el Estadio Nacional, en una postal que perdurará imborrable.
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