El estadio Metropolitano de Madrid vivió uno de los duelos más parejos de los octavos de final. El Atlético venció 2-1 a Inter de Milán muy cerca del final para dejar la serie 2-2. Un alargue en el que Alexis Sánchez entró conectado, pero muy tarde. Finalmente, el partido se decidió en los penales donde los hispanos ganaron 3-2 con el chileno como villano, después de que el meta Oblak tapara su remate.
Un partido que no defraudó en cuanto a las expectativas. Definición en la que el cuadro español tomó de inmediato la iniciativa. Una presión alta y un juego muy vertical desarticularon al líder absoluto del calcio.
A los 5 minutos, el lateral izquierdo colchonero Samuel Lino probó la reacción del meta Yann Sommer. El zaguero ganó em velocidad a Benjamin Pavard y Stefan de Vrij, pero su remate cruzado fue bien repelido por el golero suizo.
El Atlético se instalaba con mucha gente en campo de los lombardos, aunque cuando los visitantes lograban pasar esa presión, hacían daño. Así ocurrió a los 13 minuto, cuando el neerlandés Denzel Dumfries ganó la banda y remató sobre el arco del esloveno Jan Oblak, quien respondió en el tiro y el rebote.
El agobio propuesto por el equipo del Cholo surtía efecto. La pelota duraba muy poco en los pies de los nerazzurri, quienes veían como el rival cortaba los circuitos.
Sin embargo, los atacantes del cuadro de Simone Inzaghi eran peligro latente y constante. Prueba de ello es el largo remate de Lautaro Martínez que dio en Axel Witsel y casi se cuela en la portería de Oblak.
A los 28 minutos, la escuadra de Simeone volvió a apretar. Esta vez fue Hermoso quien se encontró con el balón en la izquierda, con mucho tiempo para un centro preciso en la cabeza de Álvaro Morata, cuyo remate fue contenido en la línea por Sommer.
Sin embargo, el equipo de Inzaghino tiene toque y, sobre todo, recursos. A los 33 minutos se puso en ventaja en el estadio Metropolitano tras una gran jugada combinada. Alessandro Bastoni alargó para Nicoló Barella, quien ganó línea de fondo para habilitar de manera precisa el gol de Federico Dimarco, a los 33′.
La ventaja visitante duró solo un par de minutos. Después de una serie de rebotes, Koke ensayó una habilitación que sobró a Pavard. La pelota quedó en los pies de Antoine Griezmann para el 1-1.
El mismo francés estuvo muy cerca de lograr la ventaja e igualar la serie, a dos minutos del descanso. El campeón del mundo inventó una jugada en área chica, pero su remate fue desviado de manera urgente por Pavard.
Emoción hasta el final
El tiempo era el gran enemigo del cuadro colchonero. Así lo entendieron los jugadores que comenzaron con mucho vértigo la segunda fracción del partido. A los 52 minutos, Griezmman otra vez estuvo cerca de aumentar las cifras, pero Sommer estuvo notable para evitarlo.
Los españoles sostenían el gasto del trámite, pero no lograban darle profundidad a su dominio. A 15 del final, Rodrigo Riquelme intentó un largo remate que terminó en tiro de esquina.
Pero el córner favoreció a los italianos. A los 76 minutos, un contragolpe administrado por Lautaro Martínez permitió un pase filtrado preciso del argentino para Marcus Thuram. El galo quedó solo frente a Oblak, pero su remate se fue muy lejos sobre la portería local.
A nueve del final, Inter volvió a perdonar. Otra vez el contraataque surgió en los pies de Martínez, aunque ahora fue Barella quien remató al cuerpo del golero eslovaco de los hispanos.
Los minutos finales fueron de sufrimiento para el cuadro lombardos. A los 85 minutos, el recién ingresado Memphis Depay avisó con un tiro que dio de lleno en el vertical. En la siguiente, el neerlandés no falló, recibió de Koke en el punto penal y remató colocado para el 2-1 de Atlético de Madrid y así empatar la serie.
En los descuentos, Griezmann falló de manera increíble desde área chica y su disparo se fue sobre el arco de Sommer, en inmejorable posición para cerrar la serie que, finalmente, se fue al tiempo extra.
A pesar del evidente cansancio en ambos equipos, el duelo no perdió intensidad en el alargue. Con peligro en ambas áreas. A los 95′, Thuram volvió a fallar, esta vez con un centro preciso de Yann Bisseck.
Alexis falla en el final
En la otra área, fue Depay quien volvió a poner a prueba a Sommer. Y aunque la pelota dio rebote, el mismo pudo ser contenido por el golero helvético. En la jugada siguiente, un cabezazo de Lautaro en el primer córner de Inter se fue por muy poco, a los 97′.
El partido tuvo que esperar 102 minutos para ver a Alexis Sánchez en la cancha, luego de su ingreso del errático Thuram. El ingreso revitalizó a la ofensiva de su equipo. Intentó tirarse un poco más atrás para administrar la pelota e intentaba buscar el espacio para acercarse al arco contrario.
A los 112 minutos, el tocopillano provocó un peligroso tiro libre para la escuadra de azul y negro. Sin embargo, el remate de Hakan Calhanoglu se fue muy lejos.
En el final del duelo, todas las intenciones de jugar en su equipo. Una verdadera aduana que intentó cerrar el partido antes de los penales. A los 117, un pase filtrado para Davide Frattesi bien pudo hacer la diferencia, pero los españoles salvaron el riesgo.
Una serie que se definió en los penales. Calhanoglu y Depay dejaron el marcador 1-1, pero Oblak tapó el disparo de Alexis Sánchez, quien quedó un par de minutos como el villano.
Pero su compañero Sommer salvó al chileno, tras tapar la intención de Saúl. Pero la noche era de Oblak, quien tapó un segundo consecutivo, ahora a Davy Klaassen.
Rodrigo Riquelme dejó la cuenta 2-1 para el local y Francesco Acerbi puso el 2-2, aunque con los españoles siempre arriba. Ángel Correa no falló y Lautaro Martínez la envió a las nubes para que Atlético de Madrid ganara 3-2 en la definición y se meta en los octavos de final.
El Dortmund a cuartos
En la otra llave de la jornada, Borussia Dortmund se metió en la ronda de los mejores ocho equipos de la Champions después de conseguir un 3-1 en el marcador global ante el PSV Eindhoven neerlandés.
Después del 1-1 logrado en los Países Bajos, el equipo germano logró una victoria 2-0 en casa para meterse en los cuartos de final. Jadon Sancho a los 3 minutos y Marco Reus, en los descuentos, pusieron a los alemanes aún en carrera.