El Inter de Milán continúa en racha y se consolida firmemente en la cima de la Serie A. El conjunto lombardo le remontó a la Roma y se impuso por 4-2, en un verdadero partidazo. Alexis Sánchez, en tanto, fue nuevamente relegado a la suplencia por Simone Inzaghi y solo disputó los minutos finales.
La Loba arrancó con mayor protagonismo en el Stadio Olimpico. Desde el banco, un encantando Daniele De Rossi aplaudía la intensidad que propusieron sus pupilos en el inicio del cotejo. No obstante, los neroazurri equilibraron las acciones poco a poco. De hecho, no tardaron en romper el cero. En el 17′, Di Marco sirvió un tiro de esquina, Lukaku rechazó el envío y Francesco Acerbi capturó el rebote. El central sacó un ajustado cabezazo bombeado que fue imposible para Rui Patricio.
El conjunto capitalino no se entregó y salió en busca de la paridad. Así, en el 28′, Gianluca Mancini se impuso tras un tiro libre desde tres cuartos de cancha. Centro preciso al segundo palo para que el defensor batiera a la zaga interista. Igualdad en media hora para un cotejo que prometía.
La intensidad propuesta por ambas escuadras continuó. Hubo ocasiones para ambos lados, pero fue la Roma el cuadro que logró concretar la diferencia. Stephan El Shaarawy recibió cargado por la izquierda en un contragolpe y definió con un potente remate de zurda. El tiro se incrustó en los tres palos antes de cruzar la línea. Un verdadero golazo que los mandó en ventaja al descanso.
Remontada y solidez en la cima
El complemento arrancó con la misma vehemencia que terminó el primer parcial. De hecho, el empate no tardó en llegar. Luego de una gran triangulación, Darmian recibió por la derecha y Marcus Thuram se adelantó a su marca en el área chica, definiendo frente a la portería. Era un partidazo en 50 minutos y aún quedaba casi toda la segunda mitad.
Incluso, siete minutos después se concretaría la remontada. Una nueva buena jugada colectiva, aunque esta vez por la izquierda, terminó en un autogol de Angeliño, que se vio complicado ante la presión del delantero francés, quien asechaba con su doblete.
El Inter no desistió de su forma, aunque sí tomó los resguardos correspondientes. No le entregaron el balón a la Roma, pero comenzaron a tener una posesión más inteligente. Derechamente, corrieron menos riesgos. Con el duelo a su favor, Inzaghi decidió realizar sustituciones más defensivas. Aunque también determinó el ingreso de Arnautovic por Lautaro Martínez, desestimando la presencia del Niño Maravilla, que recién saltó al campo en el 87′.
Eso sí, logró comenzar el gol de Bastoni que sentenció el triunfo lombardo. El chileno abrió para el austriaco y fue a buscar la descarga, pero el zaguero se anticipó y selló la jugada con un zurdazo. De todas formas, el tocopillano no pudo hacer mucho más en el escaso tiempo que estuvo en cancha.
Con este triunfo, el cuadro neroazurri se consolidó en la punta del campeonato italiano, con 60 unidades, sacándole siete a la Juventus, su más cercano perseguidor.