Se juega la adición del partido entre Universidad Católica. Ariel Holan sigue buscando la forma de que su equipo supere a Palestino. Necesitado de unidades, el equipo cruzado no encuentra los caminos para vulnerar el arco de Daniel Sappa y el técnico estudiantil se inquieta. El DT mira hacia la banca para consultarle a uno de sus colaboradores. Le llama particularmente la atención una situación específica: la posición de Fabián Orellana, quien había ingresado para intentar cambiarle la cara al conjunto estudiantil. El estratega repara en que el ex jugador del Celta estaría desoyendo la instrucción que le había dado. Ante la sospecha, opta por consultar.

El registro, captado en la transmisión de TNT Sports, da cuenta de una fatal incongruencia. “¿No le dijimos a Orellana que vaya a la izquierda”, pregunta Holan, descolocado frente a la ubicación del alero. La respuesta lo termina de desarmar. “Se lo dijimos al revés”, le contesta uno de sus asistentes. “No, boludo. Se lo dicen ustedes, boludo, al revés”, insiste, remarcando la equivocación.

Desenlace fatal

El término de la escena es traumático. Holan intenta ampliar la recriminación. “Así tienen...”, alcanza a decir, antes de recibir un mazazo fatal: Maximiliano Salas bate a Matías Dituro y señala el único gol del encuentro. El que le permitía a la escuadra de Gustavo Costas quedarse con la victoria y aumentar a diez el registro de derrotas del tetracampeón del fútbol chileno en el actual torneo, con el consiguiente efecto en la aspiración de alcanzar un inédito quinto título en fila. La decepción de los estudiantiles se traslada a todos los rincones de San Carlos de Apoquindo, aunque no es posible observar la reacción del entrenador frente a la conquista árabe.

Lo concreto es que a Holan le irritan las equivocaciones. En la antesala del encuentro ante Palestino, el estratega no había vacilado, precisamente, en encargar una mayor solvencia defensiva y contundencia en el otro sector del campo. “No solo Palestino es un rival difícil, en la liga no hay partidos simples. Tiene buen sistema defensivo, gol, pelota parada, contragolpe. Vamos a tratar de imponer nuestro juego. En función de lo que vimos el domingo pasado, el equipo creció, pero nos cuesta agregarle a esos momentos la eficacia y el sistema defensivo general. Y creo, también, que tenemos que seguir creciendo en el juego con pelota. Pese a que hicimos muchos goles y que debimos marcar muchos más, la gran tarea para el hogar es el sistema defensivo y eso incluye la posesión del balón, con una estabilidad que dure los 95 minutos. Es mi tarea. Es un equipo que pienso que tiene que cumplir objetivos en este segundo semestre. En la Copa Chile y pensando en obtener un cupo en la Copa Libertadores. Y en ajustar cosas para 2023″, había respondido en el marco de una conferencia de prensa que ofreció telemática.

Fabián Orellana, el jugador que desató la inquietud de Holan (Foto: Agenciauno)

Antes, inmediatamente después de la caída frente a Curicó Unido, también había expuesto críticas. “Estoy contento con el mercado de pases que hicimos, pero tendremos que tener mucho trabajo, paciencia y autocrítica para mejorar en el corto plazo. Porque soy responsable y el conductor del equipo, y de armar un equipo que tenga un nivel de error que nos permita competir. Con este nivel de error, competir, no es tan fácil. Veo esto de cara hacia adelante, con mucho optimismo y confianza. Estoy convencido de que será un equipo competitivo”, disparó.

Estamos en una reorganización del equipo. Que vuelva a ser sólido. Soy optimista y tengo que encontrar el funcionamiento que el equipo muestra a ratos. Ahora debemos buscar eficacia. Solo con buenos momentos no se ganan los partidos”, insistió, en otro frontal reproche.

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