Pocas audiencias deportivas han recibido tanta atención mediática como la que se vivió este fin de semana en el Comité Nacional de Arbitraje Deportivo. Ximena Restrepo y Marcelo Gajardo fueron los ganadores de un proceso que los terminó dando por inocentes ante las denuncias emitidas por las atletas Poulette Cardoch y Berdine Castillo.
Ambas velocistas acusaban un trato discriminatorio por parte de la vicepresidente de World Athletics y del entrenador del relevo 4x400 luego de haber sido sacadas de dicha prueba solo horas antes de competir en el Estadio Nacional. Además, la atleta chilena de origen haitiano, denunció un trato racista por parte de la madre de Martina Weil. Todo esto fue estudiado por el CNAD, quienes a través de su tribunal determinaron que “se rechaza la denuncia por la unanimidad de los miembros de este Comité Nacional y en consecuencia se absuelve a los denunciados de la denuncia formulada en su contra”.
El veredicto obviamente no calmó las aguas. Gran parte del escrutinio público criticó la determinación en contra de las denuncias de las atletas, pero desde el ente han sido claros al respecto. “Nosotros no fallamos para dejar contenta a la galería, fallamos conforme lo que dice la ley”, explicó a El Deportivo, Eduardo Arévalo, presidente del CNAD.
Una frase decidora, pero que sigue sin detener las preguntas del escrutinio público. La gran interrogante sigue siendo si existen opciones de que este proceso se extienda o de que las atletas puedan encontrar una respuesta distinta en otro tribunal. Algo que sus protagonistas intentan responder.
¿Una historia que continúa?
Desde el Comité Nacional de Arbitraje son claros. El fallo emitido este sábado no es apelable, ya que ellos funcionan como tribunal de última instancia. Eso es explicado por Arévalo, quien a La Tercera le entrega los detalles de esta situación.
“El procedimiento en Chile que nos rige es claro. La primera instancia son los Tribunales de Honor y de Disciplina. Nosotros somos segunda instancia para efectos de recurso de revisión, pero como aquí se anuló el fallo de primera instancia, porque ahí sí habían errores procesales graves y se destituyó a los miembros del Comité, nosotros pasamos a ser tribunal de única instancia. El Decreto 1 de la ley señala que los fallos y resoluciones del Tribunal de Arbitraje serán inapelables, salvo el recurso de reposición por lo cual ellos tienen cinco días para un recurso de reposición que es en caso de veredicto, pero la sentencia tiene solo recursos de rectificación y enmienda”, señala.
Eso sí, Arévalo admite que las atletas aún podrían presentar un recurso de protección después de que se conozca la sentencia, pero que no ve esto como algo factible, ya que sostiene que todo el proceso se hizo acorde a lo que la ley exige. “Para un eventual recurso se tiene que vulnerar algún derecho constitucional como por ejemplo el principio de igualdad ante la ley, el debido proceso, el no ser oído en el tribunal, que el fallo sea arbitrario o ilegal. No se cumple ninguno de ellos, por lo tanto no se me ocurriría presentar un recurso de protección cuando no se ha vulnerado ninguna garantía constitucional”, confiesa.
Lo cierto es que pese a la confianza de Arévalo en el trabajo realizado, desde la defensa de las atletas manifiestan una opinión totalmente contraria. Sebastián Buré, abogado defensor de Cardoch y Castillo, entrega sus reflexiones y aclara el camino que se podría tomar si es que sus representadas deciden que quieren seguir buscando un castigo para Restrepo y Gajardo.
Menciona por ejemplo que si las atletas así lo deciden, se puede recurrir a la Unidad de Integridad del Atletismo, a la Corte Interamericana de Derechos Humanos o incluso a la justicia ordinaria porque “se podría configurar un delito”. Eso sí, es enérgico en puntualizar que todo esto depende de la voluntad de las denunciantes y que todas esas opciones tienen que estudiarse por lo que no hay ninguna definida.
Sobre el por qué se podría recurrir a estas instancias, Buré es directo: “Hay varios elementos por los cuales se puede estudiar algún tipo de recurso, pero ante otro tribunal”. Estos también los explica al detalle durante la conversación que tiene con este medio: “Son tres etapas claves. Uno, la destitución que hacen ellos del Comité de Ética de Fedachi. Segundo, que Arévalo instó a que se conociera por el CNAD y tuvo comunicación constantemente con la Responsable Institucional, dando consejos que después no se daban a lugar en lo sucesivo de la audiencia y 12 horas de incorporar prueba para 20 minutos de deliberación sin ninguna sanción”, relata.
El punto de que el presidente del CNAD mantuvo comunicación con Valeria Alonso durante la investigación también es abordado por la defensa de las atletas. “Cuando esto pasó yo no era parte del caso, yo me incorporé en los últimos 10 días al proceso porque las chicas necesitaban un abogado. Yo estoy acá ad honorem, porque me gusta el deporte y fui atleta. Desde que me incorporé encontré raro que el juez se dirigiera a esta parte, a dar consejos, qué se yo. Nunca tuve confianza de ello”, añade.
Además, el letrado lanza otra frase contudente sobre el rol que tomó Arévalo en la audiencia. “No es juez, ni siquiera es abogado, no tiene la idoneidad técnica para resolver sobre normas del código procesal penal, normas de derechos fundamentales procesales penales, normas procesales de derecho internacional público, no tiene la idoneidad para saber que principios procesales priman sobre otros”, remata.
¿Restrepo y Gajardo exigirán disculpas públicas?
Tras meses de cuestionamientos y ataques públicos, Ximena Restrepo y Marcelo Gajardo han sido declarados no culpables de casos de discriminación tras el relevo 4x400 femenino de Santiago 2023. Por lo mismo, una de las dudas que surgió es si los acusados ahora buscarán disculpas públicas de los estamentos que estos meses han cuestionado su trabajo.
Marcelo Gajardo, respondió a La Tercera esta interrogante, rechazando de plano esta opción. “De ninguna manera voy a pedir excusas públicas a la Federación ni a nadie. Sólo espero de aquí en adelante las cosas de solucionen en bien del atletismo y de nuestro deporte nacional. Vamos a tener que trabajar mucho de aquí en adelante para sanar estas denuncias infundadas. Las normas y protocolos deben estar 100% claras y reglamentadas tanto para atletas, entrenadores y deportistas”, menciona el entrenador del relevo 4x400 para Santiago 2023.
Una aclaración que acompaña de un profundad reflexión sobre el presente de la actividad. “Espero que el deporte nacional nunca más pase una situación como esta. Yo no estoy ni contento ni feliz de esta resolución, porque aquí todos hemos perdido. El atletismo nacional se ha visto envuelto, manoseado de una manera que no se merece. Hoy día deberíamos estar hablando de los espectaculares resultados que han tenido nuestros atletas en los Juegos Bolivarianos U20. Que Max Moraga fue oro en decatlón, que Antonia Ramírez, Benjamín Aravena y Ramón Fuenzalida clasificaron a la final al mundial de la categoría, que Kevin Huang fue medallista en el disco. Nuestro atletismo está lleno de promesas”, sostiene.
Sobe el caso particular de Restrepo, este medio no consiguió una respuesta sobre si está interesada en unas disculpas públicas, pero por lo mencionado por su abogado, esto de momento no es algo de lo que tenga información. Carlos Castro, en conversación con La Tercera, aclaró: “Yo creo que cada uno de los involucrados en este caso, conoce perfectamente el por qué hizo o dejó de hacer algo y de alguna manera. Yo por lo menos no estoy en posición, ni he escuchado, ni se me ha pedido el forzar ningún tipo de explicación”, comentó tras conocerse el fallo.