El estallido social no le da tregua al fútbol chileno. La fecha 25 del Torneo Nacional, cuyo inicio estaba programado para este viernes, nuevamente se suspendió por falta de garantías de seguridad. La decisión se extiende a la jornada 28 de la Primera B. Ambos certámenes completarán cinco fines de semana sin desarrollo.
La situación tiene alarmados a la ANFP y a los clubes. Ayer por la tarde, varios presidentes, entre ellos los de los tres grandes, llegaron hasta la sede de Quilín, preocupados por el escenario actual que vive la actividad, debido al delicado momento social del país.
Tras dos horas de reunión con la plana mayor del ente rector, los timoneles y directivos se retiraron con el panorama, más o menos, claro: no se iba a jugar este fin de semana, como estaba previsto, pero sí el próximo.
Solo unos minutos más tarde, la ANFP oficializó la suspensión de la fecha 25 de la Primera División, donde destacaba el clásico entre Universidad Católica y Colo Colo, duelo en que los cruzados podían coronarse como campeones, en San Carlos de Apoquindo.
"La Corporación optó por esto teniendo siempre en cuenta la seguridad de todos aquellos que participan de un espectáculo de este tipo (...) Haremos el máximo esfuerzo, junto a todos los actores que hacen posible la realización del fútbol profesional, para que la actividad vuelva el fin de semana del 23 y 24 de noviembre. El regreso de la actividad del fútbol no es contrario a lo que vive nuestro país ni tampoco rivaliza con las demandas sociales que existen en este momento. La actividad es un espacio de promoción del diálogo y que tiene como uno de sus objetivos aportar a la paz social", comunicó la entidad.
A esas alturas, el Sifup ya había planteado que la fecha debía posponerse. "Acá en Chile no están las condiciones. Esperamos que la ANFP converse con el intendente y las municipalidades para ver si el torneo puede continuar", señaló Luis Marín, secretario del sindicato.
Ya con el fútbol postergado, el presidente de la ANFP, Sebastián Moreno, se reunió con el intendente de Santiago, Felipe Guevara. Allí, el timonel del balompié criollo se refirió a la situación de los torneos. "Las reivindicaciones sociales no rivalizan con el fútbol. Esta actividad está relacionada con la sociedad chilena. Juntos tenemos que propender hacia la vuelta de la actividad", comentó.
Según él, la idea es jugar y concluir el torneo. "Esto es dinámico, pero hay una buena disposición de los clubes y tenemos que juntos convocarnos hacia un diálogo que nos permita volver a la actividad", sostuvo.
Al respecto, hoy se realizará un consejo extraordinario de presidentes en la ANFP, al que asistirá el Sifup, donde el único punto de la tabla será la situación actual del fútbol. Desde Quilín afirman que dar por terminado el torneo, tal como está, no está en evaluación. "Sería la última medida. Hoy no es una alternativa", dijeron.
¿Qué piensan los clubes? Juan Tagle, presidente de Cruzados, desestima esta opción . "No estoy de acuerdo. Primero, porque afecta gravemente a muchas personas que obtienen su sustento de esta actividad. Segundo, porque hay muchas cosas en juego aún en lo deportivo y, por último, porque como fútbol podemos aportar a que el país retome su funcionamiento con un énfasis en no olvidar las legítimas demandas sociales que han inspirado este movimiento", dijo a La Tercera.
El factor contractual
Jorge Contador, mandamás de Coquimbo Unido, va en la misma línea del timonel de la UC: "Queremos jugar, los dirigentes y los jugadores, pero deben estar las condiciones. La idea es terminar el 14 de diciembre. Si no se alcanza, hay que hacerlo antes de fines de diciembre por los contratos".
Sin embargo, Freddy Palma, de Curicó Unido, piensa lo contrario. "Hay que revisar la situación de todos los clubes y buscar una salida, pero lo óptimo sería dar el torneo por finalizado", concluyó.