Lando Norris escribe su propia historia en la Fórmula 1. El piloto británico gana por primera vez una carrera en la máxima categoría del automovilismo. Lo hace, además, cortando la hegemonía de Max Verstappen, quien se ha impuesto cuatro de los seis GP que van en la temporada. Luego de su triunfo, el nacido en Bristol fue levantado en andas por sus compañeros de McLaren.
Es un ganador inédito. Y lo hizo superando al neerlandés, que esta vez fue segundo, por una diferencia superior a los siete segundos. Incluso, luego de la última vuelta, el actual campeón mundial se acercó a su colega y lo felicitó con un abrazo, en una imagen que fue inmortalizada por los reporteros gráficos.
“¡Lo hicimos, finalmente lo hicimos! ¡Los quiero, muchas gracias!”, fueron las primeras palabras que dijo Norris luego de descender de su vehículo. Se dirigía a los miembros de su escudería. Antes ya había estado 15 veces en el podio. El último primer puesto del ahora vencedor fue en el Gran Premio de Baréin, en abril de 2018, en la Fórmula 2.
Si bien, el nacido en Bélgica inició liderando, Norris alcanzó la punta en la mitad de la carrera. “Ya era hora. Llevaba mucho tiempo esperándolo y finalmente he podido hacerlo. Estoy muy contento por el equipo, por fin he podido dárselo. He tenido un poco de suerte con el coche de seguridad. El viernes sabía que teníamos el ritmo. Estoy muy orgulloso del equipo, me he quedado en McLaren porque creo en ellos”, señaló el británico luego de su victoria.
“Gracias a todo el equipo. Estoy muy orgulloso, tuvimos un fin de semana completo muy bueno. Sabíamos desde el viernes que veníamos con buen ritmo. La estrategia también fue la buena, pusimos todo hoy. Les agradezco a McLaren, a mi padre y mi madre”, agregó.
De esta manera, Norris deja atrás los tragos amargos de las veces que estuvo cerca del triunfo y no lo consiguió. Una de las más recordadas fue peleando mano a mano con Lewis Hamilton (Mercedes), cuando se largó una tormenta torrencial en Sochi que lo sacó de carrera. A tres años de aquello, el joven piloto demuestra haber aprendido y sumado experiencia. Se refleja en el desahogo que tuvo junto a su escuadra.
Mad-Max, segundo
Max Verstappen solo pudo ser segundo este domingo. Quedó por delante del monegasco Charles Leclerc (compeditor de Ferrari). Su compañero de equipo, el mexicano Checo Pérez, fue quinto. Por encima del norteamericano quedó el español Carlos Sainz (Ferrari).
En la mitad del recorrido, Norris se aprovechó de las paradas de Piastri y Sainz. Un accidente le permitió mantener la punta con la ayuda del auto de seguridad. Además, el piloto de McLaren demoró la mitad que Verstappen en su parada y salió por delante.
“A veces pierdes. Hoy ha sido complicado, con los medios no me he sentido muy bien. Luego hemos montado el duro y McLaren era muy rápido, especialmente Lando. Muy merecido, no será la última. Tenía mucho subviraje y muy poco agarre”, señaló Mad-Max luego de la carrera. Cuando quedaban cuatro giros, los seis segundos de distancia fueron irremontables para el actual monarca planetario.