La selección alemana trabaja a alta intensidad para alistar su preparación en la Copa del Mundo de Rusia, donde llegan una vez más como favoritos y con la tarea de defender la corona obtenida en Brasil hace cuatro años. El equipo de Joachim Löw ahora enfoca su atención en el amistoso que sostendrán este sábado ante Austria, que será el penúltimo juego de preparación antes de su estreno mundialista del próximo 17 de junio, ante México.
La intensidad de los trabajos realizados en Eppan, Italia, es tal, que este martes hubo un fuerte altercado entre compañeros. Y es que, según revel el diario Bild, Joshua Kimmich y Antonio Rüdiger tuvieron una áspera disputa tras un encontrón durante el entrenamiento. Ambos jugadores se encararon e insultaron y solamente la intervención del resto de los jugadores evitó un enfrentamiento físico, apunta el medio, que respalda su información con imágenes del hecho.
"Lo que pasa es que nos estamos jugando el máximo en cada entrenamiento. Estamos trabajando realmente comprometidos. Estamos haciendo trabajos realmente intensos", comentó el defensor Mats Hummels, consultado por el altercado.
Además, Julian Draxler terminó con un corte en la cara tras una agresión de Leroy Sané que, pese a todo, el diario describe como una jugada de fútbol que no generó mayores problemas.
Luego del amistosos ante Austria, este sábado, la Mannschaft se medirá ante Arabia Saudita, el próximo viernes, en el cierre de sus trabajos preparativos con miras a la cita planetaria donde, además de con México, compartirán el grupo F con Corea del Sur y Suecia.