Era un partido de vital importancia en el desarrollo de Selknam en la Superliga Americana de Rugby. Y, por eso, la consigna era derrotar a Peñarol en el Estadio Nacional para acercarse en la tabla al líder Jaguares XV y, de paso, recuperar la segunda posición. Sin embargo, a pesar de que la actuación nacional mejoró muchísimo en relación a la derrota por goleada ante los transandinos, no alcanzó para evitar una nueva caída, esta vez por 22-26.
El equipo charrúa llegaba como sublíder del certamen y con sed de venganza. “Sabíamos que iba a ser el partido más duro. Este era un escalón clave, teníamos la espina del año pasado de perder en nuestra cancha. Y eso fue el motor”, comentó a ESPN tras el partido Manuel Ardao, figura del cuadro charrúa.
Precisamente, Ardao fue el que anotó el primer try del compromiso en el minuto 4, puntuación que aumentó con la conversión de Martín Roger. Si bien, el elenco nacional llegó al ingoal a través de Matías Garafulic, a los 10′, Santiago Videla falló en la conversión. Después, dos penales consecutivos anotados por Roger les dieron a los carboneros la ventaja de 13-5 con la que se fueron al descanso.
En el inicio del complemento, otra vez el mismo jugador sumó de a tres. Sin embargo, el cuadro local se acercó a un punto de diferencia con un try de Garafulic, la respectiva conversión de Videla y un penal de Patricio Baronio.
Con el resultado tan igualado, el elenco chileno apostó a la victoria, pero los charrúas fueron más certeros. Un penal y una conversión de Roger y otro try de Ardao les dieron una ventaja que se hizo inalcanzable para los dirigidos de Nicolás Bruzzone, que de todos modos, lograron llegar al ingoal a través de Raimundo Martínez y luego concretaron la conversión para estrechar las cifras e intentar el milagro en el final. No obstante, los aurinegros mantuvieron una sólida defensa y cerraron su cuarta victoria en igual número de partidos, mientras que la franquicia nacional se estancó en la tabla.
“Es duro perder así. Era un partido aparte porque estaba toda la revancha del año pasado flotando en el aire”, comentó Garafulic, quien añadió: “Fue muy complicado y muy cerrado. Sabíamos que iba a ser así, coombativo hasta los ochenta minutos. No se nos dieron las cosas. Una derrota en casa que duele, pero hay que seguir trabajando. No lo pudimos liquidar al final... una lástima”.