Parecía, en el primer tiempo, que Qatar competía mejor que ante Ecuador. El pánico escénico que los afectó en el primer partido del Mundial no se percibía en esta ocasión. Sin embargo, las falencias futbolísticas no se corregían. Por más que Senegal no realizaba una presentación maciza, los dirigidos por Félix Sánchez sufrían por sus propias deficiencias.

Reflejo de esto es la jugada de la apertura de la cuenta, que llegaría a los 41 minutos del primer tiempo. Krepin Diatta centró desde la izquierda, sin mucha fuerza, una pelota parecía inofensiva para la zaga. Sin embargo, el líbero Boualem Khoukhi trastabilló en su afán de despejar y dejó la bola mansa para que llegue un senegalés a definir. Un regalo, en serio. Era llegar y empujar. Lo que, lógicamente, sucedió. Boulaye Dia arremetió, disparó con fuerza y superó al golero Meshaal Barsham. Nada pudo hacer el guardameta, que solo lamentaba el yerro de su compañero.

Polémica y méritos

La apertura de la cuenta fue un baldazo para los anfitriones, que instantes atrás habían reclamado con fuerza una acción que pudo cambiar el devenir de la jornada. Esto porque, a los 33′, Akram Afif fue derribado en el área por Ismaila Sarr. Parecía penal. O, por lo menos, revisable en el VAR. No obstante, el juez español Antonio Mateu Lahoz desestimó las protestas y el juego siguió como iba. En ese entonces, 0-0 todavía.

Con el 1-0 al descanso, el segundo festejo se dio a los pocos minutos de iniciado el complemento. Un gran movimiento de Famara Diedhiou en un tiro de rincón fue la llave maestra para superar la marca qatarí. Se corrió desde el centro hacia el primer palo y desde allí desvío la esférica para enviarla al segundo parante. La asistencia, que corrió por parte de Ismail Jakobs, fue tan meritoria como el mismo tanto. El laboratorio de Aliou Cissé dio resultado y en Senegal respiraban más aliviados.

Con el duelo dominado por los africanos, en Qatar recién vieron una pequeña luz de esperanza a doce minutos de que se cumpla el tiempo reglamentario. Duró poco, pero tuvo merecimiento. Mohammed Muntari cabeceó un gran centro de Ismael Mohammad y superó la resistencia del buen portero Edouard Mendy, que antes había tenido una atajada notable. Fue, además, un tanto histórico, al tratarse del primero del país asiático en un Mundial.

Pero la ilusión se esfumó rápidamente, cuando a los 84′, Ahmadou Bamba Dieng marcó el tercer, y definitivo, gol del encuentro. Un ataque hilvanado por la derecha terminó con el artillero, que llevaba poco en cancha, superando al arquero, luego de un pase de Iliman Ndiaye. La conquista se celebró con todo en Senegal, pues sabían que era el tanto de la tranquilidad.

Llegados los 90′, se agregaron seis más. Poco en comparación a otros cotejos de la Copa del Mundo. Pero no se movería el marcador. Qatar queda eliminada, pues posee cero punto en dos jornadas, mientras que Ecuador y Países Bajos ya suman cuatro; cierra frente a la Naranja Mecánica, el martes 29 de noviembre a las 12 del mediodía. Por otra parte, ese mismo día y a la misma hora, Senegal irá en busca del paso a los octavos de final ante Ecuador, en un encuentro que promete ser de los más disputados de la fase de grupos.

Sigue en El Deportivo