Simone Biles vuelve a saborear el oro olímpico: Estados Unidos gana la competencia por equipos en la gimnasia

Estados Unidos recupera su corona por equipos de la mano de su máxima estrella, quien ahora sí deja en atrás ese difícil paso por Tokio y recibe su primer oro de París 2024. Se trata de Simone Biles, la reina de la gimnasia, la atleta que denunció al FBI por errores en una investigación de abuso sexual; que le dijo al mundo en unos Juegos Olímpicos que no podía más mentalmente y que ahora tres años después, vuelve a ser la mejor del planeta.

Como líder absoluta, derrotó junto a sus compañeras a Italia, quienes se metieron en medio de un guión que parecía escrito, y es que en inicio todas las miradas estaban puestas en las dos potencias que tiene la disciplina: Simone Biles y Rebeca Andrade de Brasil. Las estrellas modernas guiando a sus respectivos países en la gran prueba de equipos.

Esa atención desmesurada a aquellas naciones se debía principalmente a que Biles y Andrade alimentan una rivalidad de éxito de taquilla para la la gimnasia. Con la experiencia del Mundial de 2023 aún en el recuerdo, todas las miradas en París apuntaban a ambas y al hecho de si es que la estadounidense logrará conquistar el oro en el salto (su especialidad) tras haberlo perdido en manos de la sudamericana el año pasado en la cita planetaria y en Tokio 2020. Eso sí en Japón, la nacida en Ohio no estuvo en la final tras haberse retirado de la competencia por problemas de salud mental.

Con esa final a disputarse el tres de agosto, la competencia por equipos era un aperitivo más que especial. Mientras las norteamericanas compartían rotación con Italia, Brasil lo hacía con China. Así, distanciadas de ejercicios, las dos estrellas vivieron su primera jornada por preseas.

Pero esto es por equipos y ahí es donde Italia tomó el rol de protagonista sorpresivo, al punto de que llegó a la última pasada de la última rotación con el liderato. Era un golpe a la cátedra, pero aún les faltaba el desafío más importante. Mantener esa punta ante la aparición de Simone Biles en los ejercicios de suelo.

La gimnasta de 27 años esquivó la presión y se lució en un cierre que vuelve a estirar su leyenda gracias a una pasada de 14.666, que permitió que las norteamericanas llegasen a un total de 171.296. Segunda quedó Italia con 165.494 y tercero el Brasil de Andrade con 164.497.

El oro además les da nuevamente el primer lugar en esta competencia tras haber tenido que conformarse con la medalla de oro tras caer ante una Rusia que competía sin bandera. Eso sí, hace tres años no estaba su carta estelar. La que ahora marcó las diferencias y que conquista su séptima medalla olímpica. En Río fueron cuatro de oro y una de bronce. Tokio solo le dejó un tercer lugar en la barra de equilibro. París ya le da una medalla dorada. En total pueden ser cinco las que se cuelgue en tierras francesas.