El electrizante empate 2-2 entre Inter y Atalanta, fue contradictorio para el técnico del campeón, Simone Inzaghi. Si bien reconoce que su equipo jugó de manera notable en algunos pasajes, no quedó contento con el marcador.
“Fue un partido muy emocionante, queda un sabor amargo en la boca para esa segunda parte y las oportunidades que tuvimos, nos hubiéramos merecido algo más, sin quitarle méritos al Atalanta”, aseguró a Dazn, tras el duelo.
Asimismo, agregó que “en el segundo tiempo hemos jugado a un alto nivel, pero en el primero sólo fueron 20 minutos, los otros 25 el rival fue mejor. Pero insisto, creo que hubiéramos merecido un poco más”.
Una de las grandes fortalezas de este nuevo Inter es la profundidad de su banco de suplentes. Así también lo destacó después del empate en el Giuseppe Meazza.
“Estoy satisfecho. Los chicos tienen que seguir así, es un placer ver a los que ingresaron en la segunda parte, a un nivel muy alto, Sánchez entró de muy buena manera al partido”, explicó.
Sobre el mismo punto aseguró que “Vecino, Dumfries entraron muy bien… Pero no me olvido de de D’Ambrosio y Gagliardini, quienes tuvieron algunos problemas físicos, pero están regresando. Los necesitamos a todos”, afirmó Inzaghino.
Consultado sobre quién debía tirar el penal que finalmente erró Dimarco, el entrenador explicó que “la decisión fue mía. Calhanoglu y Lautaro habían ensayado esta mañana. Pero en el campo tenía a Dimarco y Perisic. En ese momento parecía más fresco Federico, que había pateado bien esta mañana. Lo siento por él, porque hizo un gran comienzo de temporada. Esto es fútbol, es una lástima”.