Rafael Nadal vive el momento más delicado de su carrera. A un par de meses de cumplir 38 años, la leyenda del tenis vive una pesadilla en su afán por volver a las pistas y al menos poder despedirse de su laureada trayectoria en una cancha. Después de iniciar el año en Brisbane, donde llegó a cuartos de final, una lesión le impidió jugar el Abierto de Australia y tampoco los Masters 1000 de Estados Unidos. Se esperaba su vuelta en Montecarlo, pero no podrá ser.
Con un triste mensaje, el mallorquín anunció su retiro del certamen monegasco y puso aun más incertidumbre sobre el futuro. “¡Hola a todos! Están siendo tiempos difíciles para mí deportivamente hablando. Desgraciadamente os comunico que no voy a jugar en Montecarlo. Simplemente mi cuerpo no me deja”, comenzó señalando en sus redes sociales.
En ese sentido, sus palabras se tornaron dramáticas, pues agregó posteriormente que su presente es oscuro. “Y aunque sigo trabajando y esforzándome al máximo cada día con la ilusión de poder competir en torneos que han sido muy importantes para mí, la realidad es que a día de hoy no puedo”, confesó.
Finalmente, expresó que no pierde las esperanzas de poder recuperarse. “No me queda más que aceptar la situación e intentar mirar hacia el futuro inmediato manteniendo la ilusión y las ganas para darme la oportunidad de que las cosas mejoren. Un abrazo fuerte a todos y ¡gracias por el cariño y apoyo siempre!”, cerró.
Incierto futuro
“Ahora mismo, no estoy preparado para competir al máximo nivel de exigencia en partidos de cinco sets. Vuelvo a España para ver a mi médico, recibir tratamiento y descansar. He trabajado muy duro durante el año para este regreso y, como siempre mencioné, mi objetivo es estar en mi mejor nivel en tres meses”, decía Nadal en enero tras sufrir un desgarro.
Tras darse el tiempo necesario para recuperarse de las lesiones al psoas y la cadera, la gran meta del manacorí era estar a plenitud para el comienzo de la temporada de arcilla, teniendo como finalidad competir en Roland Garros, entre el 26 de mayo y el 9 de junio, y los Juegos Olímpicos de París 2024, que se desarrollarán en el mismo recinto.
Lamentablemente las complicaciones físicas de Rafa son cada vez más complejas para cumplir ese objetivo. Su última actividad fue una exhibición para Netflix junto a Carlos Alcaraz, en Las Vegas, donde mostró un buen nivel. Después de ello, anunció su retiro de Indian Wells y Miami.