Paul Pogba vuelve a brillar. El Manchester United lo destaca como el mejor jugador de diciembre,  un escenario que hace un mes parecía imprevisible. El distanciamiento con José Mourinho era evidente. El portugués llegó a quitarle el saludo y el francés reaccionó sarcásticamente cuando, a mediados de noviembre, se anunció la partida del portugués de Old Trafford.

Mou le había quitado el poder. Lo despojó de la segunda capitanía y lo hizo estar en la banca en los últimos dos partidos que dirigió. Por eso, para Pogba, la llegada de Ole Gunnar Solskjaer significó un tónico que el galo aprovechó. En tres partidos al mando del nuevo entrenador, ha entregado tres asistencias y ha marcado cuatro goles.

La nueva versión de Pogba tiene el firme respaldo del técnico noruego. "Le hemos dado libertad a Pogba... aunque también trabaja. No queremos que juegue de mediocampista central. Debe hacerlo más arriba, de '10', para llegar, ir a la derecha, izquierda... Puede ganar partidos", sentenció el estratega en su última intervención pública.

La 'resurrección' del francés será clave para otro jugador que reaparece en los Diablos Rojos: Alexis Sánchez.

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