Pablo Solari ya es toda una realidad. En River Plate suma minutos, goles y reconocimiento. Ese impulso, le ha valido ser considerado en la selección Sub 23 de Argentina, que se prepara para el Preolímpico. Como consecuencia, el interés por ficharlo se eleva y su precio también: los Millonarios fijaron en US$ 20 millones el piso para negociar su ficha.
Sus progresos llegan, también, a Europa. En el Viejo Continente hay clubes que lo tienen entre sus objetivos de mercado. La lista incluye a la Juventus, el Napoli y el Valencia. Uno de ellos, el Crystal Palace, de Inglaterra, parece más entusiasmado: está dispuesto a realizar una millonaria inversión para quedarse con sus gambetas y sus goles.
Celebra Colo Colo
En Argentina afirman que los isleños han dado pasos concretos y decididos. En ese escenario, aseguran que River Plate ya tiene en sus manos una millonaria oferta por el Pibe: casi US$ 15 millones por la totalidad de su pase. El monto es inferior en US$ 5 millones al piso que habían establecido en Núñez para sentarse a negociar por el ariete de 22 años. Sin embargo, considerando el actual escenario económico transandino, en el club de la banda sangre están dispuestos a rebajar esa cifra.
Una eventual negociación no solo les generaría beneficios cuantiosos a los argentinos. A Colo Colo, una eventual transferencia de Solari le generaría beneficios directos. En julio del año pasado, los albos traspasaron a Solari a River Plate, en una operación que bordeó los US$ 5 millones. La salvedad es que solo se vendió el 60 por ciento de los derechos económicos del jugador.
El Cacique, de hecho, mantiene un 32 por ciento de la propiedad del atacante. Vale decir, obtendrá esa parte en cualquier operación por el futbolista. Vale decir, si River aceptara los US$ 15 millones que contempla la propuesta inicial de los ingleses, a Macul llegarían US$ 4,8 millones. Por cada dólar en que se incremente la propuesta, las utilidades para el Cacique crecerán en la misma proporción. Los hinchas, de hecho, suelen bromear con esa posibilidad y con el efecto que generaría en una eventual remodelación del estadio Monumental. El de Macul, claro está.
Productividad
Después de un comienzo fulgurante, que incluyó cuatro goles en los primeros seis partidos, con Marcelo Gallardo en la banca millonaria, el arribo de Martín Demichelis le ha quitado notoriedad. Aún así, el delantero luce números atractivos en una competencia y en un club que implican alta exigencia: en 62 partidos, acumula 20 goles y 10 asistencias, además de haber celebrado el título de la Liga Profesional de este año.
El problema para Solari es la alta competencia que tiene en su puesto. De hecho, Demichelis tiene a la mano tres alternativas igualmente potentes: Manuel Lanzini, Nacho Fernández y Esequiel Barco. De hecho, el técnico ha esgrimido que la ausencia del ex delantero albo en la titularidad no tiene que ver con su falta de méritos. “No le falta nada para serlo. Pablo (Solari) se entrena para eso y yo decido si lo es o si arranca en el banco”, sentenció hace un par de meses.
“Si juega Lucas (Beltrán), adelante jugamos con cinco volantes ¿A quién saco? Decime un nombre. ¿A quién sacás? Decime vos a quién sacás. ¿A Nacho (Fernández) sacás? Andá a decírselo vos a Nacho. Es el cerebro del equipo”, dijo en la misma oportunidad, en un tono desafiante, pero que también reflejaba las dificultades para adoptar una decisión que deje a todos contentos.