Ayer, Santiago Wanderers enfrentó un decisivo partido ante Melgar, en Arequipa, por el paso a la tercera fase de la Copa Libertadores. El partido de ida, jugado en Valparaíso, terminó 1-1. Con la Universidad de Concepción prácticamente eliminada, recaía sobre los porteños la responsabilidad de representar a Chile en las fases previas del torneo continental.

Eso los hinchas lo sabían, así es como también el hecho de que la clasificación no era imposible. Es por eso que centenares de fanáticos caturros llegaron a la ciudad peruana para alentar al equipo. Los esperaron fuera del hotel en donde se quedarían los jugadores, y cuando llegaron, comenzaron a cantar. Algo que conmovió a todos los integrantes del plantel y del cuerpo técnico, que no se esperaban un apoyo tan importante.

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La noche del lunes, los caturros arribaron a la ciudad y, tras pasar por el hotel, reconocieron la cancha del estadio Monumental UNSA, donde se llevó a cabo el trascendental partido. Sobre el césped Nicolás Córdova, DT del Decano, se refirió a las sensaciones que emergieron tras sentir el apoyo de la hinchada que viajó hasta Perú para alentarlos.

"Cuando se pusieron a cantar abajo del hotel inevitablemente se nos pone a todos la piel de gallina porque jugar fuera de casa, en otro país, genera una sensación distinta y finalmente sentirse apoyado de esta forma nos enorgullece y nos obliga a dejarlo todo hasta el último minuto, así que espero que mañana (hoy) el equipo se comporte como la gente quiere", señaló al canal oficial del club.

Luego, todo ese entusiasmo se haría patente en el Monumental UNSA, donde cerca de un millar de seguidores wanderinos alentó al equipo que, con gol de Marco Medel, lograría el 0-1 que los ha colocado en la tercera fase de la Copa Libertadores, a un paso de la etapa grupal. Su próximo rival será el ganador de la llave entre Deportivo Táchira e Independiente de Santa Fe, que mañana jueves definirán su llave en Bogotá (la ida fue 2-3).