Aryna Sabalenka (2°) se consagró en el Abierto de Estados Unidos. La bielorrusa se impuso sobre la norteamericana Jessica Pegula (6°), por parciales de 7-5 y 7-5, y se quedó con el US Open. Así, levantó el tercer Grand Slam de su carrera tras haber obtenido dos veces Australian Open (2023 y 2024).
Saby vivió su revancha en el Arthur Ashe Stadium. Un año antes se despidió del certamen tras caer en la final ante Coco Gauff. Descargó toda su furia y frustración destrozando su raqueta, mientras los 23 mil espectadores apoyaban a su rival. Hoy, el contexto fue similar, pues también se midió ante una tenista local. No obstante, los decenas de miles de asistentes la ovacionaron luego de coronarse.
Fue un partido disputado desde el inicio. Ninguna se hizo fuerte con su servicio, de hecho, les costó. Pegula comenzó mejor en las devoluciones y quebró en el tercer game, pero Sabalenka lo recuperó en el siguiente.
La bielorrusa se mostró más agresiva en el arranque, ganando constantemente en la red. Así, logró un break en el quinto, encaminando el primer set. Sin embargo, una serie de errores de Saby le permitieron a la norteamericana recuperarse y quebrar en el noveno. En vez de cerrarlo, le dio vida a la estadounidense, que igualó las acciones. Sabalenka, de todas formas, logró evitar el tie break y volvió a quebrar, para llevarse el set 7-5.
Cierre de infarto
Ganar el set inicial fue un envión importante para la rusa. Sabalenka arrancó con todo el segundo parcial y quebró en el segundo game. La bielorrusa estuvo a punto de ponerse 4-0, pero la estadounidense repuntó y cambió su actitud. Resguardó su servicio para después ser ella quien consiguiera un break y así igualar las acciones.
La final estaba encendida. Pasó de un posible 4-0, que hubiese sido determinante, a un 3-3. Pegula, lógicamente, se envalentonó. Sacó a relucir su tan característico juego agresivo, algo que todavía no había podido mostrar en su totalidad. Fue ella quien logró quebrar y sacar ventaja. Ganó cinco juegos seguidos, pero cuando tenía su servicio para cerrar el set y mandar la definición al tercero, Sabalenka quebró. 5-5.
Nuevo cambio anímico de las acciones. JPeg volvió a sentir el golpe, mientras que la bielorrusa no tardó en aprovechar esto. Ganó su servicio y volvió a quebrar para posteriormente desplomarse en el piso de Nueva York, celebrando el tercer Grand Slam de su carrera.