La controversia por el caso de dopaje de Jannik Sinner (1° del ranking ATP) continúa abierta. Su absolución desató un terremoto en el circuito e incluso sus mismos colegas cuestionaron la determinación. El italiano escapó de cualquier castigo mayor, como la suspensión, tras dar positivo en una sustancia prohibida al argumentar que no tuvo responsabilidad.
La Unidad de Integridad del Tenis (ITIA) recibió la defensa del tenista de 23 años y determinó no tiene culpa ni negligencia en las dos violaciones al reglamento. El argumento detallaba que su fisioterapeuta se untó una crema que contenía clostebol, un esteroide anabolizante que se encuentra habitualmente en pomadas para tratar lesiones cutáneas. Este, sin embargo, también se utiliza para aumentar la masa muscular y el rendimiento físico.
Pese a que pudo continuar jugando sin ningún problema y meses después convertirse en número uno del mundo (el positivo fue en marzo), Sinner no estuvo exento de consecuencias.
Las pérdidas de Sinner
Sinner dio positivo en dos controles en marzo, fecha en la que se estaba desarrollando el Masters 1000 de Indian Wells. El italiano alcanzó las semifinales y cayó ante Carlos Alcaraz (3°), quien justamente fue quien se coronó en el certamen que se disputa en California.
En ese sentido, a pesar de su inocencia, sí recibió una sanción. El nacido en San Candido fue castigado con el prize money y los puntos del ranking ganados en el torneo estadounidense.
En detalle, la suma de dinero que debió devolver asciende a 325 mil dólares, es decir, casi 300 millones de pesos. Por otro lado, fueron descontados 400 puntos del escalafón mundial, correspondientes tras llegar a la ronda de los cuatro mejores del Masters 1000.
De todas formas, a Sinner no le suponen mayores pérdidas. El ranking ya fue oficializado y el italiano suma 9.360 unidades (antes tenía 9.760), pero sigue firme en la cima del listado mundial de la ATP. Más atrás lo siguen Novak Djokovic (7.460) y Carlos Alcaraz (7.360).
¿Jarry a la vista?
La situación, lógicamente, recuerda a lo acontecido con Nicolás Jarry (26°). El chileno tuvo que purgar 11 meses y perder todos los puntos del ranking por la presencia accidental de sustancias prohibidas. Sin embargo, su castigo se basó en la negligencia al consumir un suplemento vitamínico contaminado. Este era proveniente de un laboratorio brasileño que ya estaba en la lista negra de las autoridades del tenis.
Coincidentemente, ambos tenistas podrían enfrentarse en el US Open. El nacional lleva tres meses sin ganar en el circuito tras sufrir una neuritis vestibular, enfermedad poco frecuente que le afectó severamente el equilibrio y la coordinación.
Jarry cayó en las primeras rondas de Wimbledon, los Juegos Olímpicos y Montreal. Sin embargo, tras un arduo trabajo, busca llegar en la plenitud de sus condiciones al último Grand Slam del año. Ahí debutará con el australiano Christopher O’Conell (94°). En tanto, el italiano hará lo propio con el estadounidense Mackenzie McDonald (93°). En caso de avanzar, ambos se enfrentarán en la tercera ronda del US Open.