Betis luchó hasta el final, pero no pudo con Barcelona. Después de un entretenido 2-2, ambos equipos no pudieron sacarse ventajas en los minutos y llevaron la definición del segundo finalista a los penales.
El equipo culé fue más efectivo y se impuso por 4-2 con dos lanzamientos contenidos por Marc-André ter Stegen. Claudio Bravo no pudo hacer lo mismo y los blaugrana se ganaron el derecho a jugar la final de la Supercopa ante Real Madrid, el domingo en Arabia Saudita.
El cuadro catalán ha sentido un alza en su juego, en gran parte gracias a la inversión que hizo la institución comprometiendo derechos futuros. Y aunque en l plano internacional no le alcanza, sí se perfila como uno de los grandes animadores del fútbol hispano.
Así, el cuadro de Manuel Pellegrini es la justa medida de la madurez que ha adquirido el Barça del técnico Xavi Hernández. Porque los primeros 20 minutos marcaron un franco desequilibrio entre ambos equipos.
Al menos un par de veces, el meta chileno Claudio Bravo -quien fue titular por el portugués Rui Silva- estuvo cerca de ver su valla caída. Sino fuera por la falta de efectividad de Rober Lewandowski, quien falló en dos ocasiones claras.
Entonces el cuadro bético despertó. Adelantó un poco sus líneas y obligó a los errores del cuadro blaugrana. Sin embargo, a los 23 minutos fue la gran campanada de aviso. Pedri derrotó la floja resistencia del arquero chileno, pero el offside automático sentenció la posición prohibida de Raphinha.
Pero el cuadro sevillano se dio cuenta de que Barcelona no era inexpugnable. Pasada la media hora, fue el mejor momento de los dirigidos del Ingeniero. Marc-André ter Stegen estuvo notable para sacar de la línea un cabezazo de Germán Pezzella, a los 31 minutos.
Cuatro más tarde, el ex Fluminense Luiz Henrique se llevó por la banda a Jordo Alba y su centro no pudo ser conectado de milagro por Borja Iglesias, cuando los hinchas albiverdes ya celebraban el 1-1.
Sin embargo, se intuía en que los catalanes podrían anotar en cualquier momento. A cinco minutos del entretiempo, una gran jugada de Ousmane Dembelé -el mejor de los catalanes- terminó en un pase gol a Lewandowski. El polaco remató sobre la salida del zaguero Luiz Felipe y el rebote le quedó preciso para derrotar a Bravo con un remate de primera.
En el final del primer tiempo, Luiz Henrique se encontró con la pelota frente al arco, pero su remate fue repelido de manera notable por el meta culé Ter Stegen.
Definición en los penales
En el segundo tiempo, Pellegrini se vio obligado a mover las piezas. El ingreso de Wiliam Carvalho por Sergio Canales dio más control a los de Heliópolis en el mediocampo. Encima, Xavi Hernández sacó a Dembélé, quien tenía descontrolado a Aitor Ruibal, y a Frenkie de Jong; cambios que le quitaron volumen a su equipo.
Los de Sevilla sintieron la baja de su rival y se animaron en lograr, al menos, un empate. A los 77 minutos una gran jugada de Luiz Henrique dejó solo a Nabil Fekir en el área, quien remató de primera para el empate 1-1.
A nueve del final, el Betis esquivó otra bala, cuando el VAR anuló una nueva conquista de Lewandoski por posición de adelanto de Ferrán Torres, en el inicio de la jugada.
Así, el duelo se tornó de ida y vuelta. Miranda pudo entregar la ventaja al Betis, a los 84′, pero su disparo fue contenido por el meta alemán del Barça en el primer palo. En los descuentos, llegó lo mejor del meta chileno. Ansu Fati enfrentó solo al de Viluco, quien sacó con la punta de los dedos el fuerte remate del juvenil culé.
El cuadro andaluz terminó mejor en el epílogo de los 90 minutos, pero no pudo romper otra vez el cerco y el duelo se fue al tiempo suplementario. No más iniciada la prórroga, una volea cruzada de Ansu Fati encontró el arco del Betis para el 2-1 y así comenzar a cerrar la clasificación a la final de la Supercopa de España.
Pero si algo caracteriza al equipo del entrenador chileno es su espíritu de lucha. A los 11 minutos del primer suplementario, otra gran jugada de Luiz Henrique terminó en un taconazo perfecto de Loren Morón para el 2-2 del cuadro andaluz, delantero oriundo de Marbella quien solo había jugado las dos primeras fechas de LaLiga, en agosto pasado.
Cerca del final un taco de Ansu Fati encontró bien ubicado a Bravo, quien controló en la línea. En la jugada siguiente, el juez Carlos del Cerro Grande expulsó al mexicano Andrés Guardado y los sevillanos debieron afrontar la última parte del partido con 10 hombres, cuando Luiz Henrique ya jugaba en una pierna, con evidentes dolores musculares.
Ninguno de los dos equipos pudo sacar ventajas y la definición de la semifinal se fue a los penales. Tal como ocurría en los entrenamientos del Barcelona hace ocho años, Bravo competía con Ter Stegen en una tanda desde los doce pasos.
En ese ítem el meta alemán fue más eficiente. Tapó los penales de Juanmi y William Carvalho, mientrad que los catalanes no fallaron uno solo ante Claudio Bravo, todo para lograr un 4-2 y meterse en la final de la Supercopa, el domingo en Riad.