El campeón está vivo, pero trabajó más de la cuenta. Real Madrid debió llegar a hasta la prórroga y los penales para eliminar a Valencia en la primera semifinal de la Supercopa de España. Tras el empate 1-1. el cuadro merengue venció 4-3 en los penales en el estadio Rey Fahd de Riad, Arabia saudita, y espera al ganador del duelo entre Betis de Manuel Pellegrini y Barcelona.
Lejos de intimidarse por el campeón de LaLiga y actual monarca de este mismo torneo, el cuadro que dirige Gennaro Gattuso comenzó el partido a gran ritmo, complicando constantemente a la última línea.
El técnico italiano del cuadro naranjero copó el mediocampo e intentó contar los circuitos del equipo blanco que, a ratos, se vio desconectado, especialmente entre la línea de volantes y su tridente de ataque formado por Rodrygo, Karim Benzema y Vinícius Júnior.
Sin embargo, la gran riqueza del elenco monarca de la Champions League está en sus individualidades. A los 14 minutos, la gran jugada del delantero galo no alcanzó a terminar en gol. Y, en la siguiente, un largo remate del uruguayo Federico Valverde se fue un poco ancho.
Pero la presencia del experimentado Edinson Cavani siempre fue una referencia de peligro para el Madrid. Cuando el reloj no llegaba a los 19 minutos, un cabezazo del ex Napoli fue bien contenido por Thibaut Courtois.
Entonces Valencia se atrevió un poco más. Comenzó a desbordar por las orillas y complicó constantemente a los blancos con centros cruzados que obligaron a sacar la pelota constantemente.
Pero el gigante de Chamartín tiene esa jerarquía que lo hace uno de los equipos más peligrosos del planeta. A los 38 minutos, un largo pase de Éder Militao encontró la carrera precisa de Benzema, quien cuando ingresó al área fue derribado por el suizo Eray Cömert. Pena máxima que el mismo galo se encargó de convertir en gol para el 1-0, a seis minutos del entretiempo.
Definición en los penales
Pero el cuadro che merecía una mejor suerte. Después del descanso mostró el mismo ímpetu que derrochó en la primera parte y en solo 50 segundo ya había empatado las cifras.
Siempre bajo el mismo argumento. Centro desde una de las bandas impulsado por Toni Lato. Y aunque la pelota sobró a Cavani, Samuel Lino remató de primera en el segundo palo, tras ganar la espalda de Lucas Vázquez.
El 1-1 puso algo más de justicia al marcador. El Madrid intentó reaccionar, cuando el croata Luka Modric ya había ingresado tras el entretiempo, pero el cabezazo de Nacho se fue por muy poco, a los 51 minutos.
Tres minutos más tarde, un potente disparo de Samuel Lino dio en la cara de Militao, cuando el balón ya tomaba dirección hacia el arco del meta belga.
Pero ambas fuerzas lograron anularse. Después de la hora de juego, el encuentro cayó en un vacío, en el que ninguno de los dos equipos supo sacar una ventaja, ni siquiera en el juego.
A dos minutos del epílogo, un cabezazo de Benzema que se fue la ocasión más peligros del campeón de LaLiga en la temporada pasada. En los descuentos, Vinícius Júnior tuvo en su pies el gol, pero su manso remate dio en el cuerpo del arquero georgiano Giorgi Mamardashvili.
NI hubo tiempo para mucho más y el duelo se fue al tiempo suplementario. El cuadro merengue inició mejor en esos 30 minutos extra y, no más iniciar el primer tiempo, Vini volvió a obligar una excelente reacción del meta valencianista.
En el final de los primeros 15 minutos, un remate colocado del alemán Toni Kroos obligó a otra buena reacción del golero georgiano, quien comenzaba a convertirse en figura.
Pero Valencia solo estaba dormido. Así lo demostró Fran Pérez, quien estuvo muy cerca de ganar el partido en la prórroga, sino fuera por la gran reacción de Courtois.
Al final, el resultado 1-1 en los 120 minutos fue el resultado más justo para dos equipos que alternaron dominio y ocasiones, Entonces, todo quedó aplazado a la definición por penales.
En la definición, los capitalinos fueron más efectivos. Anotaron sus primeros cuatro penales, mientras que para Valencia falló Cömert y el tiro de Gayá fue contenido por Courtois para vencer 4-3 y llegar a una nueva final.