El tenis chileno buscaba reencontrarse con la medalla de oro en los Panamericanos. Para ello, Alejandro Tabilo y Tomás Barrios debían derrotar a los brasileños Marcelo Demoliner y Gustavo Heide, en un partido que se vislumbraba como estrecho, debido a la gran experiencia del primero y a la irrupción del segundo, que horas antes había quedado el eliminado en un extenso duelo en las semifinales del singles. De todos modos, eso no importó y los amazónicos se impusieron por 6-1, 2-6 y 10-7.
Un quiebre sobre el saque de Barrios en el tercer juego y otro en el de Tabilo, en el quinto, le dieron una amplia ventaja a los rivales de los chilenos, quienes a pesar del gran apoyo en las tribunas del Court Central, no lograban entrar en ritmo. Un nuevo break sobre el saque del chillanejo sepultó las aspiraciones en ese primer parcial, con un claro 6-1.
Con la ayuda del público, el binomio chileno logró quebrar en el primer juego del segundo set el saque de Heide y cambiar la energía que venían trayendo hasta ese momento. Las fuerzas se equilibraron, ambos jugadores redujeron su cantidad de errores no forzados y se vieron muchas más agresivos que en el primer parcial, especialmente en la devolución. Eso se notó y en el séptimo game un nuevo quiebre, esta vez sobre el servicio de Demoliner, llevó a los nacionales a tomar una ventaja irremontable en ese segundo parcial, que ganaron por 6-2.
Definición de miedo
Con las cosas igualadas, todo se definió en un super tie break al mejor de 10 puntos. A esas alturas el repletísimo Court Central era una verdadera caldera y la tensión se respiraba en cada espacio del remodelado recinto.
Los brasileños lograron un miniquiebre de entrada, pero una doble falta de Demoliner les devolvió las esperanzas a los chilenos. Pero otra vez los amazónicos lograron dos puntos en el saque de Barrios y las cosas se complicaron en demasía. No obstante, los nacionales no se dieron por vencidos y lograron igualar la cuenta, pero luego sus rivales se recuperaron y terminaron llevándose el oro.
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emoliner con Heide