Pablo Solari se ha enquistado en el corazón de Colo Colo. A punta de actuaciones convincentes y de goles trascendentes, el Pibe, como cariñosamente lo corean los fanáticos del equipo popular, se ha transformado en un jugador admirado y querido por los fanáticos albos, que suelen ovacionarlo en cada presentación de las formaciones en el estadio Monumental. De su parte, al margen de sus actuaciones, también se han escuchado mensajes de gratitud. Ha dicho que en Macul se siente en casa y que le gustaría continuar en el Cacique.
El problema para las aspiraciones del club albo y para la intención confiesa del delantero es que la decisión no solo depende de esas dos partes. La tercera involucrada es Talleres de Córdoba, el club que lo formó y que lo envió en préstamo al Cacique. Los transandinos tenían la certeza de que Solari triunfaría en el fútbol chileno. Desde siempre lo han considerado como uno de los valores más promisorios de su cantera. Ahora insisten en un deseo que ya habían hecho público en El Deportivo hace un tiempo: recuperar al alero. La frase del presidente del club, Andrés Fassi es categórica. “No hemos tenido ninguna noticia. Talleres lo toma en cuenta para su equipo a partir de diciembre”, establece el directivo. Es decir, aguardarán hasta que termine sus obligaciones en los albos para sumarlo a la pretemporada de cara a 2022.
“Es efectivo, pero Colo Colo tiene una opción de compra que la va a ejercer. Hay conversaciones. Solari costaba cero cuando estaba en Talleres. No lo vamos a dejar salir. Nos colgarían. Queda plazo para ejercer la opción. Los contratos hay que honrarlos”, responden en Blanco y Negro. Añaden que Solari está feliz, que incluso ha recibido a sus padres en Chile y que sus progenitores también son partidarios de que siga en Chile. El directorio del Cacique se reúne la próxima semana. De esa cita surgirán señales más concretas de esta operación y de que se realizarán para retener a otras figuras, como Leonardo Gil.
No hay acercamientos
La primera parte de la respuesta obedece a los eventuales acercamientos para concretar lo que ya está pactado. La cesión de Solari contempla una opción de compra por el 50 por ciento de los derechos económicos del delantero, a razón de US$ 750 mil dólares. En Macul dan prácticamente por hecho que abonando esa cantidad podrán retener sin problemas al atacante, quien suma 35 partidos y cinco goles en Primera División, además de siete encuentros y cuatro conquistas, considerando la Copa Chile y la Supercopa. Antes de venir a Chile, ni siquiera había debutado en el primer equipo cordobés.
En Argentina, sin embargo, afirman que el trámite asegura apenas la distribución equitativa de las utilidades de una eventual transferencia futura y fijan la mirada en la otra porción del pase, que consideran clave para fijarles condiciones virtualmente inalcanzables para el deseo albo de retener a Solari. “Si (Colo Colo) ejerce la opción del 50 hay que pactar qué pasará con el otro 50. Nosotros queremos que regrese a Córdoba”, había establecido antes Fassi, el timonel cordobés.
Los transandinos creen firmemente en que la cotización de Solari ha subido considerablemente. “Es un jugador que hoy tiene una valuación de US$ 3 millones y que va a valer mucho más”, puntualizaba Fassi a El Deportivo en septiembre. Desde esa fecha, Solari ha seguido sumando presencias, goles y aplausos. En Argentina están al tanto de esas consideraciones, porque siguen su carrera al detalle. En ese escenario, la cortapisa para el Cacique irá de la mano de la dificultad de afrontar una inversión proporcional a ese valor.