La jornada de hoy será una de las más trascendentes de la vida institucional de Colo Colo en el último tiempo. A partir de las 10.30, en la Casa Alba, se desarrollará la Junta de Accionistas que definirá la nueva correlación de fuerzas de Blanco y Negro. Posteriormente se elegirá el nuevo directorio y el reemplazante de Gabriel Ruiz Tagle en la presidencia.

Aníbal Mosa saborea su retorno al control de la institución, ya que en menos de un año incrementó su propiedad desde el 29,1 al 34,76%, lo que le permitirá sumar un nuevo director a la mesa y quedar con tres miembros. En contraparte, el bloque de Leonidas Vial y Gabriel Ruiz Tagle pierde un puesto, por lo que ahora contará con cuatro.

El empresario de origen sirio ha preparado un golpe maestro. Lleva más de un mes buscando un nombre bombástico. Una persona de fútbol, pero no un exjugador. Y fue así como dio con Harold Mayne-Nicholls, según confirmaron ayer a La Tercera tanto fuentes del directorio como del círculo del expresidente de la ANFP.

Las negociaciones entre Mayne-Nicholls y Mosa comenzaron hace un mes. El puertomontino buscaba un nombre potente para fortalecer su propuesta y, sobre todo, para dar una señal de gobernabilidad en la concesionaria, incluso entre los detractores que había generado en su período anterior en la testera del club.

En el entorno de Mayne-Nicholls y en el del empresario de origen sirio reconocen que se reunió un par de veces con Mosa. En esos encuentros recibió la propuesta formal para integrarse al proyecto. La respuesta fue afirmativa, pero, a diferencia de lo sucedido con Universidad de Chile, el manejo fue absolutamente sigiloso. Mañana se decidirá si incluso Harold se convierte en el nuevo presidente de la concesionaria. Ruiz Tagle ya dejó claro que no se postula en la Junta a la reelección.

Harold ya había dado muestras de querer volver a la primera línea de la dirigencia, cuando a fines del año pasado aceptó ser candidato para intentar retornar al sillón de Quilín. No le fue bien, ya que terminó tercero. Luego, en diciembre, su nombre sonó fuerte para convertirse en vicepresidente ejecutivo de Azul Azul. Incluso, presentó un proyecto deportivo, el que finalmente fue desechado por el directorio de la concesionaria. "No niego que me motivaba la idea y por eso presenté un proyecto ambicioso. Agradezco a los seguidores e hinchas de la U que me dieron su apoyo. Ahora, a analizar otras ofertas", publicó en sus redes sociales el periodista, quien también trabajó en Universidad Católica y Palestino. Y asesora a la corporación de Antofagasta.

La presencia de Mayne-Nicholls es el principal gancho de Mosa para atraer los votos de los miembros del Club Social y Deportivo, quienes definirán la elección. El perfil ejecutivo y la amplia experiencia internacional del exfuncionario FIFA son un gran atractivo para el sector que lidera Edmundo Valladares, ya que es tomado como un nombre que garantiza gobernabilidad y que se aleja del personalismo que tanto se le criticó al empresario radicado en la Décima Región.

Además, al igual que la corporación, Mayne-Nicholls tuvo profundas diferencias con Vial y Ruiz Tagle, en medio de su salida de la ANFP. De hecho, el antofagastino siempre culpó directamente al hasta hoy presidente de Colo Colo de ser el articulador de su decapitación en Quilín. Precisamente por eso, su llegada a la mesa alba se interpreta inequívocamente como un golpe al mentón del saliente Ruiz Tagle. Salvo maniobra sorpresa de última hora (ya ocurrió en la pasada junta de accionistas, cuando se bajó de la presidencia a Mosa con la compra sigilosa de acciones), Colo Colo asistirá hoy al retorno al poder del frente anterior. Y con Harold Mayne-Nicholls como carta principal del mismo.