Temuco golpea y deja muy herido Colo Colo
El cuadro sureño vence al Cacique por 1-0, con gol de Matías Donoso. Una caída dolorosa para los albos, que pierden terreno en el torneo local. El Pije, en tanto, se aleja de la zona de peligro.
D. TEMUCO 1 - COLO COLO 0
Temuco: J.L. Gamonal; P. Jerez (46', J. Soto), C. Vergara, L. Casanova, Y. Águila; M. Riquero, J. Aros (68', C. Zamorano); R. Farfán, C. Canío, A. Ábalos (81', J. Requena); M. Donoso. DT: M. Ponce.
Colo Colo: A. Orión; O. Opazo, M. Zaldivia, J. Barroso, D. Pérez; G. Fierro, C. Carmona (84', B. Carvallo), C. Pinares; J. Valdivia (64', J. Valdés); J. Aguilera (69', C. Baeza), E. Paredes. DT: H. Tapia.
Goles: 1-0, 81', Donoso se eleva por encima de Barroso en un tiro de esquina y cabecea al segundo palo de un estático Orión.
Árbitro: Eduardo Gamboa. Amonestó a Riquero, Ábalos, Donoso (T); Fierro, Barroso, Carmona, Paredes (CC). A los 90+5' expulsa a Donoso por doble amarilla.
Estadio Nacional: Asistieron 15 mil personas, aprox.
Temuco lo buscó más. Lo deseó en serio. Y Colo Colo, con ese afán de prudencia que por momentos traiciona a su entrenador, recibió un duro golpe. El Pije se impuso en su estadio por la cuenta mínima y dio un paso gigante en su misión de alejarse de los puestos de peligro, mientras que los albos se devuelven a Santiago con una frustración grande y también peligrosa, de cara a los desafíos que se le vienen.
Por convencimiento o por circunstancias. Estrategia o la simple acción de dosificar. Como sea, Héctor Tapia presentó en la cancha del Germán Becker un once mucho más ofensivo que lo exhibido en las dos fechas previas. En el dibujo, los mismos tres volantes detrás del enganche (Valdivia), pero con capacidades muy distintas a las de tres volantes de contención. Gonzalo Fierro y César Pinares, en teoría, le ofrecían al Cacique más presencia en campo rival, a la hora de analizar los equipos antes del partido.
Sin embargo, aparentemente, la orden de Tapia para sus dos incrustaciones en el mediocampo fue la prudencia. Cuidar primero el rancho propio y recién ahí buscar ser una alternativa de pase para Jorge Valdivia, el más claro de la cancha, como casi siempre. Lo cierto es que Colo Colo, lejos de dominar por volumen de fútbol, cayó en el juego de refriega y mucha intensidad que le opuso el dueño de casa. La lluvia y la cancha jabonosa ayudaban mucho a que prevaleciera ese estilo.
Así se jugó el primer tiempo. Con muy pocas llegadas a los arcos. El cuadro popular, básicamente, dependía de una habilitación de Valdivia, como la que le regaló a Paredes pasada la media hora, que termina con un disparo cruzado del artillero histórico. El mismo Paredes protagonizó el momento de mayor tensión antes del descanso, no por un remate a portería, sino por profuso sangramiento en rostro, después de chocar con la cabeza de Riquero.
Cero a cero pegado. La esperanza de gol de pospuso para la segunda mitad, que empezó mucho mejor para los temuquenses. Un cabezazo de Casanova, la amenaza del peleador Matías Donoso. Agustín Orión empezó a trabajar y parcialidad local, a entusiasmarse. Pinares bajó las revoluciones del dueño casa con su zurdazo al travesaño, pero fue la misma banca de Colo Colo la que le entregó el dominio del partido con dos cambios demasiado timoratos. Salieron Valdivia y el atacante juvenil Aguilera; ingresaron Pajarito Valdés y Claudio Baeza. La señal de retroceso fue demasiado clara.
El físico también le pasó la cuenta a los blancos. Temuco, más acostumbrado a una cancha pesada por el agua, se sentía cómodo y fue encerrando a su rival, hasta que recibió su premio a los 81'. Requena, recién ingresado, envió un tiro de esquina al corazón del área y Donoso, con potencia, literalmente le pasó por encima a Julio Barroso para cabecear al segundo palo y dejar parado a Orión. Un 1-0 más que justo, castigo también para el más contenido.
Colo Colo, apremiado por el resultado y por la tabla del campeonato, intentó remontar. Mas no tenía hombres, piernas ni ideas para concebir una jugada clara de empate. Intentos rústicos, a la que saliera, y nada más. Es que realmente los albos no tenían nada más que ofrecer. Por eso perdieron, por eso quedan preocupados pensando en el partido del miércoles por la Copa Libertadores, ante Corinthians. Temuco celebra, está en racha de la mano de Ponce, y el Cacique pierde terreno en su carrera casi desesperada por alcanzar los lugares de privilegio en el torneo criollo.
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