José Mourinho (58) es de esos personajes que le ponen pimienta al fútbol. Una frase del portugués puede marcar pauta o dejar perplejo a propios y extraños. Un festejo de gol o una acción a ras de cancha de Mou se puede transformar en una polémica y hasta en un meme. Lo concreto es que se trata de un técnico exitoso, de larga trayectoria, pragmático, con pasos en los mejores clubes del mundo, quebrando un paradigma: un futbolista de escaso éxito alcanzaría la gloria sentado en el banquillo.
Este domingo, en Italia, Mourinho alcanzó un hito en su carrera. Con la Roma, dirigió su partido número 1.000. Fue en el Estadio Olímpico de la capital italiana, frente al Sassuolo, por la tercera fecha de la Serie A. El elenco capitalino lo ganó agónicamente por 2-1, para seguir en la cima de la clasificación. El gol de El Shaarawy fue una catársis. Mourinho salió corriendo a festejar el gol y llegó hasta la ubicación de la barra local.
La historia de Mou como DT arrancó el 23 de septiembre del 2000, en el Benfica. Antes, había formado parte de cuerpos técnicos como asistente de Bobby Robson. Así pasó en el Barcelona.
“90.000 minutos, más los tiempos de descuento… ¡Es mucho!”, dijo el estratega de La Loba durante la semana. “Nunca pensé poder alcanzar esa cifra y nunca he contado los partidos. Pero cuando me informaron de que me faltaban solo ocho o nueve, entonces lo anoté y he comenzado a hacer las cuentas”, añadió.
Mourinho cuenta con 25 títulos en su palmarés: seis con el Porto, ocho con el Chelsea, cinco con el Inter, tres con el Real Madrid y tres con el Manchester United. Pertenece al selecto grupo de “elegidos” que ha ganado la Liga de Campeones con dos equipos distintos: en 2004 con el Porto y en 2020 con el Inter de Milán. De los 1.000 partidos, fueron 321 en el Chelsea, siendo el equipo donde dirigió más. Por cierto, la primera etapa en Stamford Bridge fue mejor que la segunda. De esos mil, 638 son triunfos.
Su retorno al fútbol italiano ha sido positivo, hasta la fecha. Luego de su salida del Tottenham y varias incursiones en los medios de comunicación (como comentarista), la Roma lo contrata con el objetivo de volver a ser protagonista. El club le cumplió con los refuerzos solicitados, como el caso del arquero Rui Patricio y el delantero Tammy Abraham, uno de los grandes precios del mercado de pases en el Calcio. Además, clasificó a la fase grupal de la Conference League, el nuevo torneo de clubes de la UEFA, el tercero en relevancia tras la Champions y la Europa League.
Con 1.000 partidos en el cuerpo, Mourinho sigue vigente. Y todo un showman.