Hay tres tipos de Gabriel Ruiz Tagle (63). El empresario, ése que en 1973 fundó la empresa papelera Dimar y en 1978 PISA, otra del mismo rubro. El político, ése que en 2010 fue designado por Sebastián Piñera como Subsecretario de Deportes. Y por último, el que está de vuelta, el dirigente del fútbol, ése que en 2007 llegó a presidir Colo Colo y que ayer, en una maniobra con Leonidas Vial, lo tiene de vuelta en lo más alto del directorio albo.

Su polifacetismo lo ha enfrentado en algunas ocasiones a debates consigo mismo. Como en el momento en que iba a sumir como Subsecretario. Antes de eso, aseguró que mantendría sus acciones en Blanco y Negro. Eso sí, la Contraloría le dio un duro golpe al establecer que debía abstenerse de cualquier decisión relacionada al fútbol por "contravenir especialmente el principio de probidad administrativa".

Al final, vendió su paquete accionario a Hernán Levy, consuegro de Piñera, quien sucedería en el cargo como presidente de Colo Colo a Guillermo Mackenna, que estuvo casi un año después de Ruiz Tagle, en una transición de un cargo al que en noviembre de 2013 dijo en este periódico que no volvería: "Quiero decirle una cosa categóricamente: no voy a volver a Colo Colo, ni me voy a postular a la presidencia de la ANFP".

Antes de irse, bajo su mandato el Cacique ganó cuatro títulos (Apertura 2007 y Clausuras 2007, 2008 y 2009). Por él pasaron los técnicos Borghi (ya estaba cuando asumió), Astengo, Barticciotto, Jara y Tocalli y en su mandato hubo jugadores como Suazo, Sanhueza, Lucas Barrios, Millar y Paredes. Rozó la parte final de Vidal y Alexis en Macul.

Pasó Ruiz Tagle a la historia por convertirse en el primer Ministro de Deportes de Chile. La cartera se creó en 2013, Piñera volvió a confiar en él y lo nombró como tal. Se mantuvo ahí hasta marzo de 2014, con el fin del periodo presidencial. Tras abandonar esa faceta política, retomó el trabajo en su oficina de inversiones. A fines de ese mismo año ingresó como socio financista a la Ciudad Deportiva Iván Zamorano.

El timonel del elenco de Pedreros no ha estado exento de controversias. Su gestión en el Instituto Nacional de Deportes fue cuestionada en 2015. Otra vez la Contraloría tuvo algo que decir al publicar un informe donde objetaba las rendiciones de gastos de la Corporación Juegos Suramericanos 2014.

El año pasado, el Tribunal Nacional de la Libre Competencia determinó que en 2000, cuando Ruiz Tagle era dueño de PISA, acordó la subida de precios de algunos productos del rubro junto al gerente general de CMPC Tissue. La colusión del papel confort. El aludido negó toda acusación: "Desde que dejé la gerencia general en 2001 hasta el día de hoy, he estado totalmente desligado de la gestión".

Son las mil caras del nuevo presidente de Colo Colo, sobre el que además flotó a menudo la sombra de coordinación con la Garra Blanca. El poliédrico Ruiz Tagle está de vuelta.