Tres aspirantes y una leyenda: Roland Garros se prepara para las semifinales masculinas con Nadal como protagonista
Este viernes se disputa la ronda de los cuatro mejores del Abierto de Francia, con el español como figura principal. El Rey de la Arcilla va por su título 14 en París, pero Ruud, Cilic y Zverev quieren impedirlo, especialmente, este último, que de ganar el trofeo de Los Mosqueteros será el nuevo número uno del mundo.
Solo cuatro tenistas quedan con vida en el cuadro masculino de Roland Garros. Cuatro jugadores que buscan el mismo objetivo, pero que llegan con papeles totalmente distintos a la Philippe Chatrier. El protagonista, sin dudas, es Rafael Nadal (5°). Serán sus semifinales número 15 en el Abierto de Francia, un certamen en donde pasó de humano a leyenda y en donde ahora intentará estirar aún más su ventaja en la carrera por los Grand Slams y ser el mejor de la historia.
El español no la tiene fácil. Todos quieren ser su verdugo. Ganarle a Rafa en la cancha principal del recinto parisino es muy especial, ya que, hasta ahora, solo dos jugadores han logrado esa hazaña. Primero fue Robin Soderling en 2009 y después Novak Djokovic por partida doble, en 2015 y 2021. Los otros 107 encuentros que ha jugado en París han terminado con Nadal como vencedor. Por eso, su nombre en tierras galas es mucho más grande que en cualquier otro evento.
En esta ronda de los cuatro mejores, Alexander Zverev (3°) será su rival. El número tres del mundo disputará sus primeras semifinales en Roland Garros y espera, por fin, dar un golpe en cuanto a Grand Slam se trata. El alemán, además, no solo tiene la chance de derrotar a una leyenda, sino que también se encuentra con la gran opción de ser el nuevo número uno del mundo una vez finalizado el torneo.
Si Sacha conquista el certamen, alcanzará la cima del ranking mundial por primera vez en su carrera, transformándose en el 28° jugador en lograrlo y en el segundo germano en conseguir llegar a la cima del escalafón, tras Boris Becker.
De todas formas, Zverev sabe que no será un partido sencillo. Ya al comienzo del torneo, sin siquiera pensar que lo tendría que enfrentar una semana después, había advertido del peso de la figura de Nadal en Roland Garros: “Lo vimos entrenar y, de repente, su derecha es 30 kilómetros más rápida. Sus pies se desplazan más ligeros. Hay algo en esta pista que le hace jugar un 30% mejor solo por estar en ella”, lanzó el alemán, que ahora deberá buscar la forma de contrarrestar esas sensaciones. Alguien que lo ayudará para aquello será su entrenador, Sergi Bruguera, quien además es el capitán de la selección española de la Copa Davis, por lo que conoce las debilidades de su compatriota... Si es que las tiene.
El frente a frente está a favor del ganador de 21 grandes, ya que Rafa ha vencido al teutón en cinco ocasiones, con solo tres derrotas. En arcilla el saldo es 4-1 para el balear; y esa derrota fue en Madrid, un torneo que no tiene ninguna similitud con este Abierto de Francia.
Nadal solo piensa en su Grand Slam número 22. Conseguir su 14° Roland Garros sería el premio máximo para una temporada en donde encontró una de sus mejores versiones, pese a todas las dudas, pero en donde también ha sufrido muchísimo por su lesión en el pie izquierdo. En un torneo donde ha dejado mensajes con sabor a despedida, un nuevo título sería la guinda de la torta. Pensar en el retiro quizás aún es apresurado, pero lo más probable es que, después del Abierto de Francia, el tenista de Manacor se tome una gran pausa para solucionar sus problemas físicos y pensar en el futuro.
Ruud y Cilic van por la sorpresa
Durante toda la semana se dijo que el lado del cuadro por donde van Casper Ruud (8°) y Marin Cilic (23°) no tiene peso. Que quien llegue a la final deberá conformarse con el segundo lugar. Que el campeón viene del lado que tenía Djokovic, Nadal, Zverev y Alcaraz. Una predicción que tanto el noruego como el croata buscarán tirar al tacho de la basura.
Ambos han jugado a un gran nivel durante el torneo y llegan a estas semifinales preparados para reescribir la historia: Ruud, con la confianza de ser uno de los mejores jugadores en arcilla que hay en el planeta, y Cilic, con la seguridad de ser un experimentado en torneos grandes.
El ocho del mundo jugará sus primeras semifinales de un major, logrando marcar un hito para su país y la región escandinava. Pero por la falta de experiencia no se preocupa. Viene cosechando grandes logros sobre polvo de ladrillo y esta instancia parecía un camino obvio en su carrera. Siete de sus ocho títulos como profesional los ha conseguido sobre arcilla, incluyendo los dos de esta temporada.
Marin, en cambio, llega a esta semifinal para decirle al mundo que aún tiene mucho que entregar. Tras unas temporadas en donde no logró dar sus mejores actuaciones, el ganador del US Open de 2014 parece estar de regreso. Su clasificación a las semifinales de Roland Garros lo transformó en el quinto jugador activo en lograr llegar esta instancia en los cuatro Grand Slams.
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