Mohamed Salah inicia la fase de recuperación de la luxación acromioclavicular que sufrió en la final de la Champions mientras defendía al Liverpool ante el Real Madrid. La lesión demandará entre tres y cuatro semanas de recuperación, según informó el cuerpo de especialistas que lo atiende.
En el peor escenario, el atacante arriesga perderse la fase de grupos del Mundial, considerando que el debut de Egipto se producirá el 15 de junio, ante Uruguay. Cuatro días después, los africanos enfrentarán al anfitrión y cerrarán su participación en la primera ronda frente a Arabia Saudita, el 25 de junio.