Lo de Álvaro Brun y los clásicos ya parece una maldición. O al menos, un conjuro que lo afectó durante este semestre.
Es que el Tribunal de Disciplina de la Asociación Nacional de Fútbol ratificó la tarjeta roja que recibió ante Curicó y lo castigó con una fecha de suspensión. O sea, se perderá el duelo ante Universidad Católica que se jugará a fin de mes y no participará de ningún clásico en esta segunda rueda.
Es que las cartulinas parecen perseguir al uruguayo, porque ya lleva dos expulsiones en los últimos tres partidos que ha jugado y se dan justo antes de un compromiso de envergadura. ¿La anterior? Fue en la disputa con O’Higgins y eso le valió quedar fuera del choque contra Colo Colo.
Quizás por lo mismo, Azul Azul había preparado una defensa para Brun. La entidad pedía que le borraran la amonestación, por considerarla injusta -alegaban que Piero Maza que estaba en el VAR tuvo un criterio dispar para la misma jugada en otros encuentros-, pero sus argumentos no fueron válidos para la instancia jurídica del ente rector.
Por lo mismo, Brun no volverá a vestir de corto en el Campeonato Nacional hasta después de las Fiestas Patrias y solo deberá buscar una oportunidad en el once de Diego López en la llave de octavos de final de Copa Chile, donde los laicos enfrentan a Cobresal.
Claro que su expulsión quedará en la historia del Romántico Viajero, porque ya llevan 10 expulsados en el Torneo, marca que no registraban desde el Torneo de Apertura 2004. Además, se transformaron en la escuadra con más hombres yéndose a las duchas antes de tiempo, seguidos por Deportes Antofagasta, con ocho.
¡Quienes son los afectados? Bastián Tapia y Brun, en dos ocasiones cada uno; además de Israel Poblete, Camilo Moya, Pablo Aránguiz, Yonathan Andía, Ignacio Tapia y Cristian Palacios. Claro que lo de Bastián es bastante particular, porque dejó a los estudiantiles con 10 contra el mismo contrincante: Colo Colo.