La cancha del estadio Monumental había resistido de buena forma los dos eventos artísticos que se realizaron durante las últimas semanas: la presentación de Bon Jovi y el festival Santiago Rock City. Tanto Colo Colo como las productoras a cargo de los respectivos montajes habían cubierto el campo de juego para que se mantuviera en las mejores condiciones posibles para el duelo entre Chile y Ecuador.
Sin embargo, anoche surgió un 'enemigo' inesperado: la lluvia. Las precipitaciones que cayeron sobre la región Metropolitana transformaron la cancha de Macul en una superficie resbaladiza, jabonosa.
Aunque ambos equipos tomaron las debidas precauciones y los futbolistas utilizaron tapones duros y más largos que lo habitual, hubo varios que sufrieron las consecuencias de las condiciones en que estaba la cancha. De cada lado. De hecho, Gonzalo Jara y Francisco Silva se resbalaron, lo que puso generarle complicaciones al equipo de Juan Antonio Pizzi.