Todos los esfuerzos que hizo la UC para retener a Edson Puch se justifican con jornadas como la que tuvo este domingo el iquiqueño. A su ritmo, los cruzados vencieron a Antofagasta a domicilio en un partido de ida y vuelta y volvieron a la cima del campeonato. Hasta aquí, con campaña perfecta.
Ariel Holan metió mano en el equipo: sacó a Buonanotte, posicionó a Fuenzalida como interior y puso a Rebolledo como lateral derecho. La apuesta le dio resultado al DT argentino, que con el Chapa más adelantado ganó en profundidad y no lo desgastó con el ida y vuelta que supone el trabajo de un defensor.
El primer tiempo encontró a dos equipos atrevidos, con ganas de ir adelante y dejando poco espacio a la especulación. El primer gol era cosa de minutos, porque aunque la UC fue la que abrió la cuenta gracias a Puch a los 26', el equipo Puma bien pudo haber hecho lo mismo, sobre todo por un par de fallas de Dituro, algo extraño en él.
La polémica se instaló poco después, cuando Felipe González, de bajísimo cometido, cobró penal de Kuscevic a Figueroa e insistió en su decisión sin revisar el VAR. La repetición televisiva dejó un mar de dudas en torno a su determinación. Como sea, Bello lo transformó en el 1-1.
Y cuando el descanso ya estaba a la mano, otra vez apareció la figura de Puch, quien con un movimiento descolocó a su marcador y se generó un pequeño espacio para habilitar a Zampedri, que marcó el 1-2. El mismo argentino anotaría el 1-3 en el segundo lapso, para darle un nuevo triunfo a la Católica, que sufrió al final por el descuento de Carlos Muñoz en el segundo minuto de alargue.
Aún así, el equipo estudiantil vuelve a la cima del torneo, con nueve puntos en tres partidos. Tal como en 2018 y 2019, la UC arranca con un paso arrollador, sin rivales aparentes en la competencia local.