Nicolás Jarry (28º) está de vuelta. Después de su destacada actuación en Wimbledon, donde cayó en un apretado encuentro de tercera ronda frente a Carlos Alcaraz, el tenista nacional dio por iniciada oficialmente su temporada en cancha dura en el ATP 250 de Los Cabos. Al frente tuvo a la promesa mexicana Rodrigo Pacheco Méndez (817º), a quien superó sin grandes inconvenientes por 6-3 y 6-1.
A lo largo de su carrera, el jugar en cemento siempre ha sido una tarea pendiente para el número uno del país, ya que a pesar de tener un juego que puede ser propicio bajo esta superficie, los grandes resultados en este tipo de pista aún no llegan. Por eso, el certamen mexicano aparece como una muy buena oportunidad para dar ese nuevo salto de calidad.
Pese a la diferencia de ranking, Nico no enfrentó un partido tan sencillo frente al zurdo local, quien ostenta el logro de ser el primer jugador azteca en alcanzar el número uno del mundo junior y que poco a poco está reencantando a la afición de su país con un deporte que hace varios años no le regala buenos resultados.
La mayor experiencia y consistencia en los tiros fueron clave para que el pupilo de Juan Ozón impusiera sus términos. Así fue como llegó el primer quiebre del partido, en el sexto juego. A pura potencia el nieto de Jaime Fillol logró desnivelar y comenzar a encaminar el primer set a su favor. Luego de salvar un punto de quiebre, el chileno se llevó la primera manga con una sutil volea.
En la segunda manga, Nico se vio mucho más cómodo con su juego y la solidez acostumbrada de su servicio. Logró romper de entrada y afrontar con mucha tranquilidad el desarrollo del encuentro ante el yucateco, que si bien mostró tiros interesantes, estuvo lejos de poder sostener la intensidad que le propuso el chileno.
Con mucha jerarquía y profundidad, la mejor raqueta nacional consiguió dos nuevos breaks, que le permitieron acelerar el desenlace y cerrar en una hora y 20 minutos una contundente victoria en la cálida y húmeda costa mexicana.
“Contento con mi partido, las condiciones son bien especiales como se puede ver, así que contento de seguir adelante”, señaló el Príncipe, tras el encuentro. Y añadió: “Han sido un par de semanas con duro trabajo para sentirme cómodo. Lo manejé muy bien y me da confianza para seguir adelante”.
Por el paso a cuartos de final, Jarry se medirá en la madrugada del jueves (01.00, aprox.) con el neerlandés Gijs Brouwer (144º), quien superó al canadiense Gabriel Diallo (140º) por 6-2, 4-6 y 6-2.
Barrios, eliminado
Tomás Barrios (121º) no pudo ratificar todo lo bueno que ha venido realizando en la temporada y se convirtió en el tercer chileno eliminado del certamen tras Alejandro Tabilo y Gonzalo Lama. Su verdugo fue el alemán Dominik Koepfer (84º), quien se impuso por 6-4 y 6-3.
El europeo quebró en tres ocasiones (una en el primer set y dos en el segundo) para cerrar una cómoda victoria ante el chillanejo, que nunca pudo encontrarse en la cancha, cometiendo muchos errores no forzados y sin disponer siquiera de puntos de rompimiento. Ahora, su próximo desafío será la qualy del Masters 1000 de Toronto, si logra entrar, o el Challenger de Standford.