Un discreto respiro: Betis vence a un equipo de la cuarta categoría y avanza en la Copa del Rey

La buena noticia es que Betis finalmente ganó, después de tres derrotas consecutivas. La otra es que lo hizo ante un equipo de la cuarta categoría, el modesto Sant Andreu, al que superó por 3-1 en la Copa del Rey.

Un cuadro catalán que lo desdibujó en la cancha por largos minutos. Solo un rebote en un penal fallado por Vitor Roque, muy cerca del final, dio cierto alivio al cuestionado Manuel Pellegrini. En los descuentos, Abde logró el tercero.

Pero el mal momento de los andaluces es evidente, tanto la cadencia de su juego como en el talante de sus jugadores, quienes se sienten como responsables directos de esta crisis, después de tres derrotas consecutivas.

Una situación manifiesta en el estadio municipal Narcís Sala de Barcelona. Porque el modesto cuadro catalán que milita en la Segunda Federación, cuarta categoría del fútbol hispano, plantó cara frente al popular club sevillano.

Porque en los primeros minutos fue imperceptible esa larga diferencia de planteles. Un Betis con muchas bajas no pudo enhebrar juego ante el corajudo equipo de la Ciudad Condal.

Recién a los 17 minutos, un error en la salida entre Méndez y Guille dejó la pelota en los pies de Cédric Bakambu que se fue muy cerca del arco de los anfitriones.

Pero fue una pelota detenida la que permitió la apertura del marcador para los visitantes. Una torpe mano en la medialuna del área puso el balón en tiro libre para Chimy Ávila, quien la puso junto a un palo para el 1-0 del cuadro del Ingeniero, a los 26′.

Sin embargo, la conquista solo pudo maquillar lo que ocurría en la cancha. Los catalanes hacían daño en el mediocampo y no demoraron en conseguir un merecido empate.

Circunstancia que se produjo a nueve minutos del descanso, cuando se juntaron los mejores jugadores de la Unió Esportiva Sant Andreu. Serrano abrió a la derecha para Jurado y esperó el pase atrás para conectar de primera el 1-1.

Tanto que ponía una dosis de justicia a un encuentro entre un rival que tenía muy poco que perder, contra otro que lamenta sus cuitas en el cuestionado momento del Ingeniero.

Pesadilla bética que no terminó en el comienzo del tiempo complementario. A los 48 minutos, un largo pase de Lucas Viña dejó solo a Paredes frente a Fran Vieites, pero el meta verdiblanco ganó en el achique.

En la jugada siguiente se instaló la polémica. Viña ganó en la derecha y la pelota dio en la mano del lateral andaluz Sabaly, rebote quien bien pudo haber sido cobrado como penal en un partido que no tuvo VAR.

Instantes más tarde, Giovanni lo Celso cayó en el área y el árbitro balear Sergi Busquets devolvió gentilezas, después de hacer caso omiso de la caída del campeón del mundo.

A los 58 minutos, el cuadro del chileno salvó el honor. Serrano remató sin ángulo y la pelota, literalmente, se paseó por la línea antes de que Vieites la sacara. En la segunda y tercera pelota, dos rebotes jugaron a favor de los béticos. Tres más tarde, Serrano remató muy solo y su disparo se fue por muy poco.

Pellegrini se vio obligado a mover las piezas. El ingreso del brasileño Vitor Roque le dio más volumen a los verdiblancos. A los 64′, tras un error del meta Nil, estuvo cerca de anotar.

A los 76′, el atacante cedido desde Barcelona falló de manera increíble en el punto penal. Claro que, dos más tarde, se fabricó un penal que él mismo sirvió. El baló fue tapado por el golero Nil, pero Marc Bartra estuvo preciso para corregir el error y anotar el 2-1, a los 79′.

Con el equipo catalán muy cansado, la mayor experiencia de los jugadores béticos permitió administrar la ventaja y poner el tercero en los descuentos, convertido por Abde. Un buen resultado en las cifras, per discreto en el trámite, en la antesala de un duelo clave ante Barcelona, el próximo sábado en el Benito Villamarín.