A la medida de Messi. Así parece estar armándose el Inter de Miami con miras a la nueva temporada de la MLS. Si ya la llegada del astro argentino suponía una revolución para la competencia estadounidense, ahora la escuadra del estado de Florida da otro golpe de mercado con la incorporación de Sergio Busquets, compañero de La Pulga en sus mejores jornadas en el Barcelona, pieza elemental en esas versiones del equipo azulgrana y, para muchos, el mejor volante defensivo de la historia.
Es el propio club el que, a través de su cuenta en Instagram, da cuenta de la incorporación, un nuevo acierto para el club que tiene como rostro reconocible al inglés David Beckham, uno de los principales accionistas del club.
A disfrutar
Busquets tiene 34 años. Desarrolló su carrera íntegramente en el club catalán, en el que se cansó de sumar títulos. El 10 de mayo, a través de un vídeo lanzado en las redes sociales, anunció su salida del club al final de temporada, finalizando con ello 18 años en la entidad, en los que festejó 32 coronas, lo que incluye las conquistas nacionales e internacionales que acumuló.
Desde esa desvinculación, y tal como aconteció con Messi antes de que se oficializara su llegada al fútbol estadounidense, se especuló fuertemente con su arribo al incipiente torneo de Arabia Saudita. Sin embargo, todo indica que la elección del argentino fue uno de los factores fundamentales para que se haya decidido por aceptar la oferta del cuadro rosa.
Busquets también forma parte de la historia del fútbol mundial por otra situación: integró la escuadra que en 2010 consiguió el único título planetario que ha celebrado España, de la mano de Vicente del Bosque.
En el certamen que se disputó en Sudáfrica fue titular indiscutido y participó en los siete encuentros que jugó el cuadro ibérico.
Dos años más tarde, engrosó su palmarés como seleccionado al participar decisivamente en la consecución de la Europa que organizaron Polonia y Ucrania.