Definida ya la llegada de Mauricio Pellegrino como entrenador, Universidad de Chile se concentra, ahora, en la búsqueda de refuerzos. Los laicos necesitan piezas en todas las líneas, para potenciar una estructura que viene mostrando debilidades en las últimas temporadas, con el inminente riesgo de descenso incluido. La llegada del estratega supone un refresco, al menos en el plano de las ideas. La labor de Azul Azul será dotar al nuevo entrenador de las piezas que le permitan desplegar una mejorada propuesta.

El nombre de Brahian Alemán está hace rato en carpeta. El volante uruguayo, quien actúa en Gimnasia y Esgrima de La Plata, reúne varias de las cualidades que les penan a los laicos. Una de ellas es el liderazgo. De hecho, es el capitán tripero. En esa condición, ha alzado la voz contra la dirigencia que encabeza Gabriel Pellegrino, a la que acusa de incumplimientos salariales. En la disputa, los plazos se separan, pero el solo ruido rompe la relación. ¿Qué tiene que ver todo eso con la U? Mucho. El dirigente se anima a asegurar que Alemán continuará en el club. “No lo quiere nadie”, asegura el dirigente, en declaraciones a radio La Cielo, de Argentina.

Brahian Alemán, en un partido de Gimnasia.

Un duro

A Alemán no le ha temblado la mano a la hora de reclamar en nombre propio y el de sus compañeros. En las redes sociales, denunció que hace dos meses que los jugadores del Lobo no cobran sus salarios. La divergencia en el plazo de la obligación incumplida rompió la relación con Pellegrino. “Mi relación con Alemán era excelente hasta hace tres o cuatro meses. Yo tenía información de que él hablaba de una deuda de cuatro meses, pero mintió ya que es una de un mes y medio. Ahí me enojé más de la cuenta”, reconoce el mandamás.

El plantel reaccionó rápidamente, el problema era uno solo. El que contestaba no era el que tenía que usar la cinta. El interlocutor con el plantel tenía que ser otro. Alguien se equivocó en darle la cinta de capitán”, profundiza el directivo, ya sin ningún afán de ocultar la distancia.

A Alemán le resta un año de contrato con el Lobo, por lo si la U quiere contar con sus servicios, necesariamente tendrá que negociar con Gimnasia. O, más precisamente, con el iracundo Pellegrini.