Dos partidos ante los rivales más tradicionales y un título de Copa Chile. Así partió oficialmente el año para el Colo Colo de Mario Salas, que mostró una cara distinta en ambos duelos en relación al año pasado, donde se caracterizó por ser un equipo protagónico.
De acuerdo a las estadísticas, algo parece haber cambiado en el planteamiento albo. Frente a Universidad Católica, logró la clasificación con números mucho más pragmáticos que en 2019. Un 37% de posesión y 235 pases contra 401 del rival fueron algunas de las cifras más llamativas de ese encuentro, en el que los albos tuvieron ocasiones claras de desnivelar, las que terminaron convirtiendo a Matías Dituro en figura.
En la temporada pasada no siempre los dirigidos del Comandante llegaron con tanta claridad al arco contrario. Y cuando lo hicieron, la efectividad no fue tan alta como en estos dos encuentros coperos. Además, al dejar tantos espacios, los rivales terminaron anotando seguido. Sin ir más lejos, Colo Colo encajó 30 goles en 24 cotejos.
"Lo planteamos cediéndole la posesión a Católica, un poco de espacio. Y eso nos genera jugar con una presión un poco más atrás, que nos da resultados. Encontramos los espacios y siento que tuvimos las ocasiones más claras, a pesar de que fue un partido muy apretado. Sabíamos que se definiría por táctica fija", reflexionó el Comandante después del partido ante los cruzados.
En la final ante la U, se repitió el fenómeno. Los albos tuvieron el balón en un 38,5% del tiempo. Registraron 266 pases versus 407 de los azules y tuvieron cinco remates totales (cuatro de ellos al arco) contra 12 y 6 del rival.
Tanto en ese encuentro como ante la UC, Colo Colo basó su juego en la velocidad de sus extremos y en la solidez defensiva, lo que implicó que Óscar Opazo y Ronald de la Fuente se replegaran y solo subieran en contadas ocasiones. Además, Carlos Carmona respondió en contención. Y Leonardo Valencia solucionó muchas cosas con su lucidez en la lectura de juego.
"Me importa cómo se hacen las cosas. Colo Colo tiene definida una forma de jugar desde que estamos acá. Lo táctico y lo estratégico fue fundamental. Se dio el partido que queríamos que se diera. Con Católica generamos una situación distinta a la que están acostumbrados. Cuando asumimos el protagonismo ante la UC a través de concepciones de juego, tomamos el toro por las astas. Ante la U, el partido se fue acomodando por momentos del juego. Cuando hacemos el gol, es otro partido y Colo Colo lo entiende así. Por eso, la forma es importante en todo el partido. A veces no se puede mantener y por eso es importante lo emocional que demostraron los jugadores", profundizó el DT tras su primer título con el Cacique.
Otro examen
Este martes, ante Palestino, otro equipo que suele ser protagonista, Mario Salas tendrá un nuevo examen para seguir moldeando este Colo Colo 2020 y ver si el pragmatismo se vuelve una tendencia o fue simplemente una necesidad por la connotación de los partidos finales de la Copa Chile.