Esta noche, Colo Colo se juega mucho en el estadio Monumental ante Godoy Cruz. Los albos llegan con la ventaja de haber ganado en la ida y buscarán la clasificación a la tercera fase previa de la Copa Libertadores. Una instancia que les reportaría un importante ingreso y ayudaría a amortiguar el importante desembolso que significó el fichaje de Jorge Almirón como técnico y la llegada de Arturo Vidal como refuerzo estrella.
En el caso del DT, el Cacique dio el golpe a la cátedra fichando al transandino, quien venía de ser finalista de la última Copa Libertadores con Boca Juniors, algo muy inusual para el fútbol chileno, pero que también implicó invertir US$ 1,6 millones más bonos por objetivos durante las dos temporadas que dura el contrato. Es decir, si el equipo avanza, el estratega y su cuerpo técnico percibirán un porcentaje de los premios.
Mientras que el King recibe US$ 1,2 millones, a razón de US$ 100 mil mensuales durante el año que dura el vínculo con el Cacique. A él se suman la compra del 50% del pase del extremo Lucas Cepeda, por US$ 500 mil y el préstamo del delantero paraguayo Guillermo Paiva, que costó US$ 550 mil. Es decir, solo en el estratega y las tres incorporaciones Colo Colo gastó US$ 3.850.000.
Si los albos derrotan a Godoy Cruz esta noche, se embolsarán US$ 600 mil. Sin embargo, en Macul la sensación es agridulce, pues el hecho de jugar con un aforo de 30 mil espectadores y no los 42 mil que habían solicitado ante la Delegación Presidencial y Estadio Seguro, provocará que dejen de percibir aproximadamente 150 millones de pesos en concepto de recaudación.
“Una lástima que no se pueda organizar bien esto. Porque esto es cuestión de organización. La gente se iba a portar bien, porque entiende el momento que está viviendo el equipo. Lo que menos queremos es ser perjudicados, estoy seguro de que la gente no va a querer perjudicar al club. Es una desagradable sorpresa, porque pensé que se iba a organizar bien”, expresó el adiestrador tras enterarse de la medida.
Y no se quedó ahí, pues también emplazó directamente a Estadio Seguro. “Yo pensé que la autoridad a cargo de estas decisiones, la señora Pamela Venegas, es gente de fútbol, que conoce bien, y en el contexto en que estamos... Hace mucho que no se juega en este estadio, la llegada de Arturo Vidal, Colo Colo, que es uno de los máximos representantes del fútbol nacional, y necesitamos el apoyo de la gente... Hay muchísimas cosas en juego. La verdad que es una lástima que no se pueda asegurar la capacidad del estadio, que no se pueda llenar. Hubiese sido una fiesta. La última vez que se llenó fue cuando llegó Arturo Vidal...”, lanzó.
Las ganancias
Y justamente la idea de Blanco y Negro al apostar por Almirón apunta a superar las fases previas y alcanzar la etapa de grupos, que entrega un monto de US$ 3 millones más US$ 300 mil por partido ganado, sin contar las recaudaciones por cada partido de local, donde la concesionaria calcula US$ 1,5 millones adicionales. Con esos montos se podrían ajustar las finanzas, que según algunas estimaciones dentro de ByN, todavía están bajo la línea de números azules.
La llave ante el Tomba no solo permitiría al club obtener un premio importante en dinero, sino que al avanzar a la siguiente ronda, en el peor de los casos, le aseguraría ingresar a la fase de grupos de la Copa Sudamericana, que otorga US$ 900 mil por acceder a esa instancia y US$ 100 mil por cada victoria, montos que ayudarían a mitigar en parte la inversión de esta temporada en caso de no clasificarse en la Copa Libertadores.
Por eso asoma como crucial obtener la victoria esta noche, porque de lo que suceda en Macul dependerá en gran medida el proyecto internacional de Colo Colo para este 2024, un capítulo pendiente para la institución hace muchos. Y, de paso, convertirse en el segundo equipo chileno en acceder a la Fase 3, luego del triunfo de Palestino sobre Portuguesa de Venezuela.