El tenis olímpico, que en París 2024 solo le deparó decepciones a Chile, está que arde. Una controvertida norma de la ITF ha despertado fuertes críticas. Jugadores como Novak Djokovic y buena parte de la prensa a nivel mundial ha reparado en un detalle clave en la composición del cuadro de individuales, que, en teoría, debía ser el más atractivo.
Los problemas comenzaron cuando varias de las figuras del deporte blanco empezaron a bajarse del certamen, que se disputa en las mismas canchas en que se juega Roland Garros, el segundo Grand Slam de la temporada. Por distintas razones, estrellas de la talla de Jannik Sinner, Hubert Hurkacz, Alex de Miñaur, Holger Rune, Andy Murray y Cameron Norrie comunicaron que no participarían en el evento.
El efecto indeseado
Al margen del simbolismo que representa la lucha por las medallas y, eventualmente, la obtención de alguna presea, de lo que Chile puede dar cuenta en propiedad por las hazañas de Nicolás Massú en Atenas 2004 y Beijing 2008, lo concreto es que sin las figuras que avisaron que no participarían el cuadro ya perdía bastante peso.
Aún así, Alejandro Tabilo y Nicolás Jarry no lograron pasar la primera ronda, aunque el foco de la discusión está puesto en otro detalle: el criterio que se utilizó para suplir a las ausencias. Ahí las críticas se centran en la ITF: a diferencia de lo que ocurre en el circuito de la ATP, donde la lista corre y le abre opciones a los jugadores que no ingresaron inicialmente por estar debajo del ranking de cierre, en los Juegos se ha optado por llenar esos cupos con deportistas que están inscritos en el cuadro de dobles. Es así como Matthew Ebden, Francisco Cabral y hasta Pietros Tsitsipas, hermano de Stefanos, pero lejos del brillo de su familiar, han tenido la opción de participar en los individuales. El griego figura 74º en duplas y no registra ranking en singles.
La rebelión
Las consecuencias son evidentes. Ebden, por ejemplo, solo fue capaz de rescatar un juego ante el serbio. A los otros dos nombrados no les fue mucho mejor. La prensa internacional ha sido categórica. “Un ridículo olímpico”, tituló, por ejemplo, el sitio Marca, de España. Un concepto similar ocupa Mundo Deportivo. “La ridícula norma de la ITF que no entiende Djokovic y afecta de pleno a los Juegos”, puntualiza.
Por esa razón, Nole alzó la voz. “Espero que la ITF junto a los Juegos Olímpicos consideren cambiar esta regla. Había muchos jugadores individuales del top 100 que tenían mucho tiempo, que eran suplentes y que podrían haber sido convocados para venir”, estableció, inicialmente. “No entiendo las reglas, no tienen lógica para mí y no creo que sea una buena imagen para el deporte”, complementó.
Carlos Alcaraz fue un poco más tibio, aunque igualmente se opuso a la regla. “Supongo que es una regla difícil. Sinceramente, hay muchos jugadores que merecen estar aquí y jugar aquí en los Juegos Olímpicos. Creo que debería ser diferente porque el próximo jugador individual en el ranking merece estar aquí si alguien se retira del torneo”, sentenció el español.