La asamblea realizada el martes en la noche en el Comité Olímpico significó un verdadero remezón para el tenis chileno. Pese a que la cita en la que participaron más de 50 dirigentes y ex tenistas (incluidos Nicolás Massú y Fernando González) no era resolutiva, igual terminó siéndola, ya que se acordó crear una comisión para reformar los estatutos y crear una nueva federación.
En la cita se hizo un desglose (ver tabla), en el que destacan deudas importantes con los jugadores, con el capitán Nicolás Massú y con la Tesorería, además de otros compromisos, como la beca Musalem. En total, las cifras ascienden a los $ 1.590 millones, lo que bajo ese nuevo escenario tendría un destino incierto, pues la nueva federación no se hará cargo de ese compromiso. Más si se toma en cuenta que la Fetech ni siquiera tiene activos para embargar.
Fue llamativa la presencia del subsecretario del Deporte, Kael Becerra, en la reunión, tomando en cuenta que el principal acreedor es el fisco, a través de la Tesorería, con una deuda que asciende a $ 495.620.721. Sin embargo, la ministra Pauline Kantor sale a aclarar la postura del gobierno al respecto: "El subsecretario fue en condición de observador. Quiero dejarlo absolutamente claro. Él quería conocer de primera fuente lo que se estaba proponiendo. Acá el Comité Olímpico es el que está liderando esta búsqueda de una solución".
Sin embargo, Kantor no está de acuerdo con que los compromisos pendientes se dejen de lado. "Creemos que la solución integral tiene que incorporar las deudas que existen. Nosotros vamos a velar para que se cumpla con todos los requerimientos que la ley exige. Se tiene que abordar el problema actual y también cómo se sigue hacia adelante".
Asimismo, existen dudas sobre el futuro deportivo. Sergio Elías, miembro del directorio de la ITF, advierte que "una desafiliación podría significar dejar de jugar la Copa Davis y Fed Cup hasta 2021, año en el que Chile regresaría en la última categoría del tenis, porque habría que iniciar de nuevo el proceso de afiliación, salvo si éste se plantea como una modificación estatutaria".
Mujica, por su parte, asegura que no está en riesgo lo deportivo. Eso sí, los estatutos tampoco son tan claros e indican que este tipo de asuntos quedan a discreción del Consejo del organismo internacional. Además, trascendió que el propio Neven Ilic, ex dirigente del tenis y actual timonel de Panam Sports, abogará frente a las autoridades de la ITF para que no haya consecuencias deportivas para el país.
Pero mientras Roberto Ossandón trabaja en un reforma estatutaria con una comisión donde también está el ex tenista Gabriel Silberstein, las asociaciones que todavía conforman la vigente Federación, lideradas por Matías Bobadilla, llamaron a una asamblea extraordinaria para el 12 de mayo, con el fin de elegir un directorio.
De este modo, podría darse la surrealista figura de que el tenis chileno tenga dos federaciones.