Una hora con Mario
El DT albo guardó silencio sobre el caso Orión, pidió fuentes y reconoció que las expulsiones son su talón de Aquiles.
Las palabras de Esteban Paredes en la despedida de Agustín Orión dejaron en evidencia la molestia de varios referentes del plantel con Mario Salas. "Hay otras cosas de las que quizás se enterarán después", dijo el capitán. Sin embargo, el técnico no se dio por aludido e incluso desafió a todo aquel que le pregunte sobre un quiebre.
"Entiendo muy bien lo que dijo Esteban. No me molestó. Es una pregunta para Esteban. No me molesta que los jugadores vengan a despedirse de un amigo. Me parece perfecto. Yo me baso en la respuesta que me dan mis jugadores en el día a día. Y hoy fue perfecta", señaló, desmarcándose.
En ese sentido, enfatizó en esta postura, argumentando: "Doy espacios para conversar, he dado espacios y no me han dicho absolutamente nada. Tengo situaciones para dar veracidad a las cosas. Más encima, entrenaron perfecto, estamos muy enfocados en Everton. En algún momento puede que eso sea real y estaremos acá conversándolo".
Durante los 55 minutos de rueda de prensa, el DT se negó a aclarar lo que gatilló la salida del argentino: "No voy a desclasificar absolutamente nada de mis conversaciones con mis jugadores. Nunca. Ayer escuché la misma conferencia y Agustín habla de motivos personales. Yo no voy a referirme. El tomó una decisión".
Eso sí, luego explicó parte de su filosofía a la hora de tomar decisiones: "Yo no doy puestos de titular. Se gana en el día a día, domingo a domingo, y eso es válido para cualquier jugador. En el momento para jugar lo que vale es cómo estás en el presente, en el día a día. Mis evaluaciones pasan por eso".
Sobre sus expulsiones, el viñamarino sí tuvo bastante autocrítica. "Siento que las cosas han ido mejor, porque me estoy ocupando de algo y sé que es mi talón de Aquiles y me voy a seguir ocupando y mejorando en el tema. No tengo ninguna duda de que voy a mejorar en el tema, va a mejorar mi relación con el arbitraje y el entorno", reveló, junto con insistir que no profirió improperios.
En ese contexto, agregó: "Es una falencia que tengo como técnico y la asumo totalmente. Yo soy un tipo temperamental, apasionado con lo que hace, lo vivo a concho. Tengo un tema con la autoridad, que tengo que mejorar por ahí".
En tanto, para el encuentro ante Everton, el estratega explicó que Jorge Valdivia todavía no está en condiciones de ser citado, mientras que Paredes aún sigue con su puesta a punto.
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