“Una máquina de correr”: Felipe Loyola deslumbra a Independiente
Los seleccionados chilenos fueron importantes en el último triunfo del Rojo, en la antesala a la fecha Eliminatoria de marzo.
Felipe Loyola deslumbra a Independiente. Este sábado, fue figura en la victoria sobre San Lorenzo. Horas después, los Diablos Rojos no dejan de hablar de sus virtudes. El jugador formado en Colo Colo es una de las grandes figuras del fútbol transandino. El año pasado ya había anunciado que estaba para objetivos mayores, lo que le valió ser tenido en cuenta, también, por Ricardo Gareca en las últimas fechas de las Eliminatorias.
Ante los Gauchos de Boedo, el exacerero fue titular durante todo el partido y fue fundamental para la victoria de los Diablos Rojos. Asistió a Lautaro Millán en el primer gol y anotó el 2-1 definitivo en el último cuarto del segundo tiempo. Según el Diario Olé, una referencia obligada, el exjugador de Huachipato fue el mejor jugador del Rojo. “Selló el 2-1 con un derechazo abajo que el arquero Gill no logró tapar”, consignan en su crónica.
Más aplausos
En tanto, el medio partidario Infierno Rojo se deshizo en halagos para el volante de 24 años. “Felipe Loyola es una máquina de correr, no importa cuando leas esto. Aunque en este preciso caso, contra San Lorenzo, no solo fue inagotable, sino que también fue héroe”, detallan en su análisis del encuentro.
Mientras, TyC Sports elevó la apuesta y lo puso en un rango superior. “Espero que se entienda el ejemplo, pero el chileno comienza a entrar en esa categoría de jugadores que, como Nicolás Tagliafico (sin comparar niveles y teniendo en cuenta la diferencia de posición), uno siente que no se pueden ir del club sin ganar un título”, destaca.
En tanto, Olé calificó su desempeño con nota 8, la máxima del partido.
Los destellos de Luciano Cabral
Luciano Cabral, el otro chileno del equipo de Avellaneda, ingresó en el segundo tiempo y pese a que no estuvo tanto tiempo en la cancha, fue aprobado. El diario La Nación no ahorró en elogios. “Independiente tiene un 10 que sabe y muchas letras en su alfabeto para prolongar la sonrisa y sostenerse en la punta”, consigna la crónica.
De igual manera, el análisis menciona que con el correr de los años la figura del 10 cada vez tiene menos peso en la conformación de los equipos. “Existe en los planteles, suelen portarlo jugadores con ciertos brochazos de talento, pero los técnicos descreen de su aporte, los reducen a un segundo plano, los marginan“, apunta.
“Su aparición le valió a Independiente volver a equilibrar un desarrollo que desde el regreso del vestuario la energía local había volcado para su lado. De su pie derecho nació la acción que acabaría con el gol de Felipe Loyola, y dejó una rabona en el aire de las que no suelen verse en las canchas argentinas”, sentencia el medio transandino.
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