Un partido inteligente es el que planteó Unión La Calera ante San Marcos de Arica: se mantuvo siempre ordenado en defensa, cedió en buena medida el control del balón pese a la localía y terminó liquidando a punta de contragolpes a los del extremo norte.
En el Carlos Dittborn, los Cementeros habían caído por 1-0 y, así, necesitan imponerse al menos por dos tantos de diferencia en el Lucio Fariña, marcador que pudieron establecer sobre la base de la tranquilidad que les permitió el gol a los siete minutos, anotado por Gonzalo Abán. Desde ese instante, el cuadro de Víctor Rivero se replegó cada vez que pudo y se prodigó variadas ocasiones de convertir el 2-0 decisivo.
En lo que sí fallaron los caleranos fue en el finiquito. En más de una ocasión tuvieron superioridad numérica sobre la zaga ariqueña, pero se equivocaban en el último pase o bien en el disparo a portería. De esta manera, el tanto crucial llegó a los 75', con una espectacular palomita del defensor central Víctor Morales.
De esta manera, un cuadro que comenzó el año con el temor de caer a Segunda División se ve ahora en camino a la Primera División. Para ello deberá esperar la última fecha del Torneo de Transición de la serie mayor, cuando se decida si su rival en la Promoción será Santiago Wanderers, Palestino o Curicó Unido.