Uno a uno de Argentina: las tapadas de Martínez y el oportunismo de Lautaro Martínez explican el triunfo

Argentina fue avasallador en gran parte del duelo. Sin embargo, en el final apretó la Roja y el arquero Dibu Martínez estuvo notable para dejar su arco en cero. En el epílogo del encuentro, el recién ingresado Lautaro Martínez tuvo el oportunismo necesario para conseguir el triunfo por la mínima.

Fue un mero espectador en el primer tiempo. Tuvo dos tapadas notables ante los disparos de Echeverría, a los 70′ y ‘76.

Fue permanente agente de salida en la derecha, cuando dobló con De Paul incomodó a Suazo. Tuvo un potente remate que tapó Bravo.

Bien en el juego aéreo y en la salida por abajo. Propinó un manotazo a Dávila que bien pudo haber sido cobrado como penal y roja.

Hizo un partido correcto. Bien en el anticipo y en las coberturas. No tuvo problema en irse en ofensiva.

Al inicio tuvo algún problema con la subida de Osorio, pero fue algo puntual. Cuando se juntó con Nicolás González, hizo daño.

Se metió entre los centrales para iniciar la salida e intentó habilitar en punta. No tuvo problemas en rematar y cometió una grosera falta sobre Suazo, no sancionada.

Su trabajo pasó más bien inadvertido, pero aportó equilibrio y seguridad en el mediocampo. Bien en anticipar los pases chilenos.

Hizo un partido opaco. Se vio impreciso en las entregas de balón y tampoco consiguió dar más volumen ofensivo. Se perdió un gol en área chica.

Cuando desbordó, puso en aprietos a Mauricio Isla en la derecha de Chile, sobre todo cuando se juntó con Tagliafico. Tuvo un tiro en el palo antes de la tapada de Bravo.

A los 36′ tuvo un largo remate que dio en la cara posterior del vertical y no mucho más. En el segundo, hizo jugar más a sus compañeros e intentó abrir la cancha.

Las dos opciones que tuvo en el primer tiempo las definió apurado, sin dirección ni fuerza.

Ingresó en mitad del segundo tiempo y, en la primera, dio un pase en profundidad a Messi. Después, falló mucho en la entrega del balón.

Entró a los 73′ y las dos que en las que pudo anotar, no controló bien. En la tercera, no falló, logró el gol en un rebote.

Desbordó e intentó hacer la diferencia, pero cuando Chile ya se sentía más seguro.

Jugó solo algunos minutos en el final y no tuvo mayor trascendencia.

Ingresó muy bien para darle mayor equilibrio a los argentinos por el costado izquierdo.