Uno a uno: la categoría de Luis Díaz y la clase de James Rodríguez hunden a la Selección

C. Vargas: fue un espectador. Incluso, si hubiese salido en algún momento de la cancha y hubiese dejado el arco solo, no habría tenido problemas, porque Chile llegó poco y nada.

S. Arias: llevó peligro por su sector y no tuvo grandes complicaciones a la hora de defender. Tuvo una tarde bastante tranquila.

D. Sánchez: implacable por arriba, ofensiva y defensivamente. Avisó con un cabezazo que tapó Cortés. Luego metió la cabeza, adelantándose a Maripán, para abrir la cuenta.

J. Lucumí: anticipa a Pulgar por arriba en la jugada previa al cabezazo de Sánchez que provocó el 1-0. Defensivamente no se complicó en la marca y siempre estuvo atento a los cruces.

J. Mojica: tuvo tiempo para proyectarse en ofensiva de gran manera y juntarse con Arias y Díaz. Defendiendo cumplió sin mayores complicaciones.

R. Ríos: se vio complicado en el primer tiempo, pero lo eximió de mayor responsabilidad la poca eficiencia chilena. En el segundo, se afirmó y jugó bastante más adelantado, por momentos.

J. Lerma: aportó equilibrio en la mitad de la cancha y se impuso sin problemas en la refriega. Tampoco tuvo problemas para descargar los balones y distribuirlos con muchísima categoría.

J. Arias: activo y bien asociado con Mojica y Díaz por su sector. En el segundo tiempo se soltó mucho más y cumplió sin mayores inconvenientes.

J. Rodríguez: dueño de todos los balones detenidos, mostró calidad en cada pase que dio, tuvo el 2-0 en el primer tiempo, pero su remate salió desviado. Luego, interceptó una floja salida de Kuscevic para dejar solo a Díaz para el segundo tanto.

L. Díaz: rápido, encarador por la izquierda, ganándole casi siempre a Loyola en ese duelo. Anotó el segundo tanto con el arco desguarnecido tras el grosero error de la zaga chilena en la salida. Fue el mejor de la cancha.

J. Córdoba: mostró potencia, pero sigue peleado con el gol y además recibió amarilla. Tuvo el primero pero fue frenado por Vargas y Cortés. Fue reemplazado en el entretiempo.

J. J. Durán: entró para meter presión en el ataque y la primera clara que tuvo la supo aprovechar, anotando el tercer tanto de su equipo.

J. Carrascal: ingresó y de inmediato tuvo una ocasión de gol. Aportó frescura en el medio de la cancha.

L. Sinisterra: una de las primeras que tocó fue una habilitación perfecta para que Durán convirtiera el tercer gol. Luego, picó al espacio y definió con claridad para poner el 4-0 final. Aprovechó a la perfección sus escasos minutos.

J. Quintero: entró con el partido ya resuelto.

J. Cabal: ingresó para refrescar la banda, cuando Chile ya estaba totalmente abatido.