Gabriel Arias: Tres buenas intervenciones para mostrar sus aptitudes. Respondió cuando fue exigido y llevó la voz cantante del fondo chileno. Siempre atento. Da confianza.
Mauricio Isla: Interesante partido del Huaso. Sin problemas en los cierres y con mucho ímpetu ofensivo. Cometió pocos errores. Tuvo un duro duelo con Heung-Min Son cuando éste estuvo en su costado. Perdió protagonismo en el complemento.
Igor Lichnovsky: Aplicado, aunque con pocas luces. Cumplió en el juego aéreo. No se complicó: la jugó al pie cuando pudo y la reventó cuando sintió la presión. Su escasa velocidad en los retrocesos le juega en contra.
Guillermo Maripán: Mezcló buenas y malas. Sufrió con los errores de Albornoz, por lo que tuvo que tuvo que doblar funciones en muchos momentos del partido. A ratos quedó mal parado. Cometió también algunos errores en la salida. En el segundo tiempo elevó su confianza y rendimiento.
Miiko Albornoz: Discreto partido. Se proyectó muy poco y tuvo demasiadas complicaciones en los retrocesos y en las coberturas. Excesivamente nervioso y errático. Jugó 66 minutos, aunque debieron ser menos.
Charles Aránguiz: Correcta actuación del Príncipe. Criterioso y aplicado. Cumplió como casi siempre. Sintió el desgaste de tanto perseguir a los veloces coreanos. Fue sustituido en el entretiempo.
Gary Medel: Voluntarioso y solidario. Ayudó a todos en el medio y salvó un par de veces los errores de la defensa. Con el balón en posesión chilena, se metió entre los centrales para ofrecer la primera salida. Líder del equipo.
Ángelo Sagal: Tímido. Encaró un par de veces a los zagueros coreanos y hasta remató al arco, pero estuvo por debajo de las expectativas. Poco participativo. La banda derecha le acomoda, pero debe mejorar en la sintonía con sus compañeros.
Diego Valdés: Buen encuentro del volante. Se complementó bien con Aránguiz, Vidal y Medel. Encaró, buscó asociaciones y siempre quiso jugar. Remató al arco y se ofreció constantemente como alternativa de pase cuando no tuvo el balón. Pide más opciones de cara al futuro. Se perdió solo frente al arco el que habría sido el gol del triunfo en la última jugada del partido.
Diego Rubio: Bajo partido. Reprobó en su regreso a la Selección. Ingresó nominalmente como centrodelantero, pero actuó como puntero izquierdo. Tuvo muchas complicaciones en todas las facetas del juego.
Arturo Vidal: El toque de calidad y jerarquía. Varios peldaños por sobre todos en el equipo. Corrió toda la cancha y participó activamente en ataque y defensa. Fue el delantero central en varios momentos del juego. Da señales de plena forma física y futbolística.
Erick Pulgar: Entró por Aránguiz en el entretiempo y no desentonó. Organizó la mitad de la cancha y equilibró al equipo. Tiene nivel para ser una alternativa.
Ignacio Jeraldino: Su ingreso (58') pretendía refrescar el ataque y lo consiguió solamente en sus primeros minutos en la cancha, cuando exhibió su ímpetu. Después fue intrascendente y pasó inadvertido.
Paulo Díaz: Reforzó la banda izquierda al entrar por Albornoz (66'), que estaba sufriendo en demasía. Se paró bien y le cerró los caminos a los coreanos por ese sector.
Pablo Hernández: Entró a 15' del término. Correteó a todo lo ancho de la cancha, aunque no pudo lucir sus principales virtudes porque, a esas alturas, el balón le pertenecía a Corea del Sur.
Martín Rodríguez: Jugó los últimos tres minutos y prácticamente no participó del juego.