El uno a uno de la UC: Dituro se hizo gigante para frenar el alza de la U
El arquero cruzado fue el hombre más destacado del clásico universitario. Tuvo al menos cuatro intervenciones clave para impedir la caída de los cruzados, que no jugaron bien, pero siguen firmes en el liderato.
M. Dituro: Solvente, seguro y con confianza. Fue la figura del partido. En el primer tiempo intervino al menos cuatro veces de manera notable para salvar su arco y en el complementó sumó un par más. Su actuación levantó al resto del equipo. No pudo hacer nada en el empate azul.
S. Magnasco: Se proyectó poco, casi nunca, pero tuvo un buen desempeño conteniendo a Benegas, Beaeusejour y cualquier azul que intentara explotar la banda. Partido correcto del zaguero, aunque falló en la marca de Aveldaño en la acción previa que terminó en el empate de la U.
G. Lanaro: Dio seguridad. Ganó casi todos los duelos individuales y, cuando falló, Dituro lo respaldó. Aprovechó las licencias defensivas de los laicos para anotar de cabeza el primer tanto del compromiso.
V. Huerta: El más débil del fondo de la UC. Sufrió con la movilidad de Henríquez. Equivocó el camino en la entrega en algunas jugadas, pero terminó afianzándose.
A. Parot: Tuvo mucho trabajo con la dupla Ubilla-Rodríguez sobre su sector. Defendió bien y se proyectó, sin embargo estuvo falto de tino y de ideas en campo contrario.
F. Silva: Empezó con algunos problemas y se vio sobrepasado, lo que lo llevó a abusar del pelotazo. Después encontró los espacios para administrar siempre la salida de la UC. El alza en su juego coincidió con la mejor cara de la UC.
L. Aued: Bajo partido del volante. Al menos no al nivel que ha exhibido regularmente en Chile. Perdió el duelo individual con Moya y Espinoza.
C. Pinares: No estuvo al nivel de otros partidos. Estuvo muy contenido por los hombres de la zona media de la U y su influencia se vio minimizada.
J.P. Fuenzalida: Batalló más atrás que en otros encuentros. Cumplió a la perfección su rol táctico. Se replegó cuando debió, hizo ancha la cancha o se centralizó en los momentos justos. Inteligencia y experiencia en favor de los cruzados.
D. Valencia: Partido ingrato para el delantero, pues le tocó el trabajo sucio. Jugó casi siempre de espaldas al arco, pero cumplió una buena labor aguantando le pelota y siendo el pivote para le organización ofensiva de la UC.
E. Puch: Menos punzante que en otras ocasiones, pero igual de influyente. Tuvo pocos espacios, pero los aprovechó. Ofreció siempre una pelota diferente, una intención mayor que el resto. Bien marcado por la zaga azul. Los problemas físicos que presentó antes del encuentro se hicieron evidentes conforme avanzaba el encuentro. Salió muy extenuado sobre la hora de partido. Su sustitución afectó negativamente a su equipo.
C. Fuentes: Ingresó para poblar la zona media, pero le costó encontrar su lugar. Tuvo que perseguir a Fernández, el gran artífice del repunte laico sobre el final del partido.
S. Sáez: Ingreso ingrato para el atacante. Entró cuando la U estaba instalada en campo de la UC, por lo que tuvo que sacrificarse y actuar muy lejos del arco rival.
D. Buonanotte: Jugó los minutos finales y, aunque exhibió todo su ímpetu, no pudo cambiar el destino del compromiso.
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