Uruguay celebra el triunfo que, probablemente, más ansiaba. La Celeste se impone a Brasil, el rival al que consideran histórico por múltiples razones. Lo hace con autoridad. La escuadra oriental se apegó plenamente al plan que diseñó Marcelo Bielsa para vencer a la del interino Fernando Diniz, quien se hizo cargo del Scratch después de la salida de Tite y hasta que llegue el próximo técnico definitivo. La sensación de felicidad perdura. Seguramente, por largo tiempo.
En el país oriental no hay margen para cuestionamientos, pero en Chile sí. “Miro Uruguay contra Brasil y me da la impresión que la cancha del estadio Centenario está más corta y angosta”, escribe Pablo Pozo, el ex presidente de la Comisión de Árbitros en su perfil de Twitter. Y añade: “Sería bueno saber si está con las medidas 105×68″. Finalmente, le atribuye la eventual avivada al rosarino. “Cómo sabe el profe Bielsa”, plantea.
La AUF lo descarta
En la Asociación Uruguaya de Fútbol no tardan en responder al postulado de Pozo. “No”, responde directamente Jorge Giordano, director de las selecciones nacionales charrúas, ante la consulta de El Deportivo. “La cancha fue inspeccionada en la reuniones técnicas”, especifica, para ponerles fin a las dudas.
La siguiente apreciación es valórica. “No sacamos ese tipo de ventajas. No nos conoce. Y menos conoce a Bielsa”, contesta, para mayor abundamiento. “Para ser claro, no se tocó nada, pero bueno...”, enfatiza, en un nuevo intento por zanjar cualquier atisbo de polémica respecto de las dimensiones del campo de juego más tradicional de su país.
La siguiente consideración es para el trabajo del rosarino. “Excelente es la palabra”, manifiesta, intentando un resumen de las sensaciones que ha dejado la labor del Loco, pese a la controversia que han generado algunas de sus decisiones, principalmente la de prescindir de jugadores históricos, como Luis Suárez y Edinson Cavani. Esa calificación está reforzada, además, por el hito que se consiguió este martes en Montevideo: volver a ganarle al Scratch después de 23 años.
La palabra de Bielsa
Después del partido, Bielsa habló del proceso que lidera y de las determinaciones que ha debido adoptar. “Los cambios, cuando un equipo debe conformarse con una serie de jugadores diferentes a los que lo han hecho tan exitosamente por más de una década no es sencillo. Si bien no es sencillo, hay muchos jugadores del equipo actual que han sido modelados por aquellos que han dejado de estar. Lo oigo, lo escucho, el respeto y gratitud con la que los jugadores hablan de los que no están, o ausentes circunstanciales, o momentáneos. Me refiero a Araujo, Valverde, a todos, salvo a los más jóvenes. E incluso los más jóvenes son producto de una formación invisible y muy rica que hacen los jugadores sobre los propios jugadores. Los más grandes sobre los más chicos”, puntualizó.
En ese escenario, manifestó la importancia de respetar la idiosincrasia del fútbol uruguayo. “Es muy importante. No se debe ignorar porque el estilo y modelo se trasmite de generación en generación. Un fútbol con tanta riqueza como el uruguayo lo peor que se podría hacer es no valorar el procedimiento. Después están los matices, las características de los jugadores y lo que se puede intentar hacer. Pero lo más importante es que nunca debe ignorarse la marca registrada de un país, y Uruguay la tiene. Hay que construir a través de eso”, estableció.