Comenzó en la U, siguió en Colo Colo y recaló en la UC, en 2019, donde logró la consolidación en un grande. Valber Huerta atraviesa un gran momento a sus 26 años y mañana pretende seguir demostrándolo, como titular ante el Cacique.
Cambian los técnicos, y la UC se mantiene arriba, ¿por qué?
Es la convicción del equipo, de siempre querer ir por más. No es fácil lograr un bicampeonato con tanta diferencia. Y ahora se redobla la apuesta y el equipo sigue igual.
¿Qué aporta Holan?
Es una intensidad más alta, se notó desde el primer entrenamiento. Es un equipo compacto, que siempre tiene que estar cerca del balón. Hay contundencia, pero hay que seguir trabajando la parte defensiva.
¿Es el punto a corregir?
Así es. Es una forma de juego que debemos seguir mejorando. El equipo se va mucho al ataque, genera ocasiones, pero hay que trabajar eso, manejar mejor las situaciones defensivas cuando el equipo desborda y se va al ataque, pero no tengo duda: el equipo va a seguir haciendo las cosas bien, mejorará los puntos débiles y encontrará un equilibrio.
¿Es su mejor momento?
Desde que se me dio la confianza de ser un líder, un punto fundamental en Huachipato, me hicieron crecer como persona . Eso me ha ayudado para realizarme en Católica.
¿Por qué no se dio antes?
Distintas situaciones. Había jugadores que estaban mejor que yo, o yo no estaba totalmente maduro. No entendía el fútbol como ahora. Todas esas etapas me han hecho madurar y transformado en lo que soy.
¿Alguna sensación especial enfrentar a Colo Colo?
No, fue una estadía muy corta.
¿Qué opina de Colo Colo?
Tiene buenos jugadores, se ha reforzado bien. Si bien no se le han dado los resultados, llega mucho, con jugadores muy desequilibrantes.
Ha vivido clásicos en todas las veredas, ¿cuál le gusta más?
El que me toca jugar. Es que no me tocó jugar en los otros y se vive distinto cuando estás en la cancha. En la UC se me dio y lo he hecho bien.
Tiene títulos con los tres grandes, ¿todos tienen el mismo valor?
El del año pasado fue mi primer título jugando como jugué. Espero seguir siendo un aporte real, un compañero en el que se puede confiar.
¿Le costó mucho llegar a esto?
Es que en Huachipato se me dio, en dos años y medio, esa continuidad que nunca había tenido. Sentí la confianza del entrenador, de mis compañeros, y eso lo más importante.
¿En la UC también la ha sentido?
Se me dio la oportunidad el año pasado con Quinteros y logramos un título. Eso te da mucha más confianza. Y ahora con el profe espero seguir haciendo lo mismo.
Se dice que los defensas tienen que imponer miedo, ¿lo impone?
Espero que sí. Pero más que eso, me caracterizo por salir jugando. Soy muy tiempista, intento anticiparme a la jugada, estar muy concentrado y, sobre todo, darle salida al equipo.
¿Un defensa más elegante?
No sé si elegante, pero siempre intento darle salida al equipo. Y el profe también nos pide mucho eso.
¿Y cómo se define?
Espero ser alguien que se impone, que los compañeros sientan que si no están ellos, está uno para defenderlos.Que si llega a pasar la pelota tengan la confianza y la certeza de que uno puede defender.
¿Se apresuró en salir de Chile?
Sí. Fueron decisiones, no sé si apresuradas, pero que ahora no sé si tomaría. Distintas circunstancias. Pero veo el lado positivo. Me ha hecho crecer, madurar y tomar decisiones correctas, estar donde tengo que estar.
¿Se siente más maduro?
Es que uno madura sobre todo cuando las cosas no van bien. Se replantean muchas cosas. Además ahora soy padre, tengo esposa. Todo eso te hace cambiar; te da otra perspectiva.
¿Se sintió mal asesorado?
No, para nada. Al final siempre las decisiones, en todo momento, fueron mías. Mis representantes o la gente a mi alrededor me aconsejaron, me dijeron qué podía ser lo mejor para mí, pero yo soy el que tomó las decisiones.
¿Por qué su pase pertenece al Watford?
Me compraron de allá, son los mismos dueños chinos (que Granada, donde estuvo en 2014). Sigo teniendo un porcentaje allá y acá.
¿Se siente parte del recambio?
Hay muchos jugadores que están haciendo las cosas bien, muchos jóvenes. En el Preolímpico se vio. Demostraron que son capaces de hacerlo bien. Ahí ya es el entrenador el que tiene que tomar la decisión de ver quién puede suplir a los jugadores que vienen jugando tanto tiempo en la Selección.
¿Por qué a su generación, la de Turquía 2013, le ha costado tomar la posta?
Hubo un momento en que hicimos las cosas muy bien, en el Sudamericano, luego en el Mundial. Pero había que tener en cuenta que en la Selección había también un plantel que estaba haciendo las cosas muy bien. Y disputar un puesto o meterse ahí no era fácil. Consiguieron dos Copa América y siguen estando a alto nivel. Entonces, no puede haber ese recambio cuando los jugadores que están, lo están haciendo tan bien.
¿Se ha normalizado el desarrollo de la actividad con violencia?
No, para nada. La gente se sigue manifestando, y puede manifestarse pacíficamente. Si lo sigue haciendo y nosotros seguimos desarrollando la actividad, va a estar todo bien. No apoyamos la violencia, sí lo otro.